Los centros privados mantienen su oferta
La oferta de títulos de posgrado de las universidades privadas vascas, la Universidad de Deusto y Mondragon Unibertsitatea, no ha sufrido el recorte que ha tenido que afrontar la UPV. En el caso de la institución bilbaína, el número de cursos se ha mantenido en unos 60 a lo largo de los últimos años, estabilidad que a buen seguro agradecen las arcas de la universidad dirigida por José María Abrego, puesto que los ingresos por esta clase de cursos supone, en palabras de la vicerrectora de Formación Continua, María José Gil, el 15% de sus ingresos anuales.
Gil defiende la validez de una fórmula, la de los masters, que parece haber entrado en una fase de descenso. 'Es una formación adicional, enfocada a cubrir unas determinadas necesidades profesionales y que tiende hacia una mayor especialización. Por ello, la receta tradicional está cambiando y cada vez es menos rígida y más adaptada a las necesidades reales. Por ello, es cada vez mayor la colaboración con empresas, instituciones y otros organismos', declara.
En cualquier caso, Gil subraya que en estos momentos son otros cursos, de menor duración y mayor especialización aún, los que tienen una mayor proyección. 'Están dirigidos en mayor medida a profesionales de aquellas empresas que reclaman una formación muy específica y determinada. Es algo más cercano a la Formación Continua, que es lo que ahora está generando una mayor demanda', asegura.
El especial contacto que mantiene por su origen Mondragon Unibertsitatea con el mundo empresarial tiene su reflejo también en los títulos de posgrado, que este curso ascienden hasta un total de 23. Así lo destaca Guillermo Irazoki, su vicerrrector de Investigación. 'Es un instrumento importante para nosotros que, por un lado, nos permite conectar en mayor medida con la sensibilidad de las empresas y que, por otro, favorece la innovación en el campo de la investigación y nos ayuda a responder mejor a las necesidades del mundo empresarial', señala.
En este sentido, Irazoki subraya que son los profesionales y no los estudiantes los principales receptores de los cursos de posgrado que ofertan. 'La orientación que le damos se basa sobre todo en complementar la formación de aquellos que están trabajando'.
