La familia de las fallecidas por el tren pide una reconstrucción de los hechos
El abogado intenta determinar el comportamiento del maquinista
La familia de la Francisca C., fallecida el viernes en el Hospital General de Alicante a causa de las heridas ocasionadas al ser arrollada por un tren el pasado fin de semana, y su hija, que murió en el acto, solicitarán una reconstrucción de los hechos para determinar el comportamiento del maquinista del tren. El accidente afectó el pasado sábado a un grupo de 147 personas que participaban en una excursión.
Antonio Martínez Camacho, el abogado de la familia de Francisca Conesa, y de su hija de 12 años, que fallecieron junto a un hombre al ser arrolladas el pasado fin de semana por un tren en Agua Amarga (Alicante), solicitará la reconstrucción de los hechos para intentar esclarecer lo sucecido. Camacho señaló que la próxima semana, una vez ratifique la familia la personación como acusación particular en el proceso judicial, presentará la petición.
El abogado indicó que, según la información que ha contrastado con el único herido que permanece aún ingresado, Francisco Montoya, tío de la niña fallecida, 'es importante que pueda realizarse una reconstrucción de los hechos para ver el campo de visión y las posibilidades que tenía el maquinista de poder ver o no a los excursionistas que iban con chalecos reflectantes y si aminoró la velocidad o no y toda una serie de cosas que son importantes'.
El lunes, si están en condiciones, la madre de Conesa y la hermana comparecerán ante el juez para ratificar el escrito de personación. Será entonces, según Camacho, cuando pedirán al juez que empiece a tomar declaraciones de personas responsables, de testigos y perjudicados. Asimismo, está previsto que también el lunes la Unión Excursionista de Elche se persone en el caso como acusación particular.
Último adiós
Por otra parte, a las 11.45 de ayer se ofició, en el Tanatorio de Elche, la misa por Conesa. Decenas de personas se acercaron a dar el último adiós a la tercera víctima mortal del siniestro, que falleció el viernes en el Hospital General de Alicante a consecuencia de las graves heridas sufridas en el accidente. Su cuñado, Montoya, se recupera favorablemente y ya está en planta. El accidente se produjo la noche del 28 de septiembre cuando un grupo de 147 personas participaban en una marcha nocturna, organizada por la Unión Excursionista de Elche, desde el apeadero de Renfe de San Gabriel hasta Guardamar del Segura.
El grupo se vio sorprendido al poco de comenzar la marcha por un tren de largo recorrido, que despidió a varias personas contra el barranco que hay en la zona. En el siniestro falleció una niña de 12 años, mientras que un hombre de 65 murió horas después en un centro sanitario. La madre de la pequeña, que estaba ingresada en la Unidad de Reanimación, falleció debido a la gravedad de las heridas sufridas.
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