Marcha a Madrid: en defensa de nuestra dignidad

Mañana día 26, un grupo permanente de cien trabajadoras y trabajadores andaluces, convocados por CCOO y UGT de Andalucía, iniciarán en Córdoba una marcha a pie hasta Madrid, que concluirá el 5 de octubre en una concentración-manifestación de trabajadores de todo el país organizada por las confederaciones de UGT y CCOO contra el Decretazo.

A lo largo de diez días, unos tres mil compañeros y compañeras de toda Andalucía, en grupos de 300 cada jornada, participarán en la marcha. Los trabajadores del sector agrario abrirán la misma durante la primera jornada. El 5 de octubre se unirán a la movilización todos los trabajadores andaluces, unos veinte mil, hasta confluir en la concentración-manifestación ya mencionada.

La ya larga confrontación del movimiento sindical de clase en Andalucía contra el Real Decreto 5/2002 de 24 de mayo, puesta de manifiesto de manera reiterada, con el apoyo de miles de trabajadoras y trabajadores andaluces, fuerzas políticas de la Comunidad, con la única autoexclusión significativa del Partido Popular, organizaciones y entidades de la sociedad andaluza, en la manifestación celebrada en Sevilla el pasado 9 de mayo y en la huelga general del 20 de junio, va a tener su continuidad en esta nueva movilización sindical que, sin duda, lo va a ser también de la sociedad andaluza, en una marcha por los derechos que garantizan la dignidad en el mundo de trabajo, y la protección social, imprescindible en una sociedad moderna que, como la andaluza, aspira desea y pelea por ser también solidaria.

Para los hombres y mujeres de UGT, esta nueva movilización sindical no lo es sólo contra la agresión y pérdida incuestionable de derechos laborales y sociales que supone el decretazo, en fase de tramitación parlamentaria en estos momentos y -demostrado el talante político y social del Gobierno y su Grupo Parlamentario- su inminente aprobación por el Congreso. Es, también, una movilización social, una marcha sindical contra una política económica que se traduce, en el terreno sociolaboral, en el debilitamiento sistemático de los derechos laborales y sociales de los trabajadores y que supone, hoy ya, para la mayoría de los trabajadores andaluces indefensión, precariedad y devaluación sistemática de las condiciones de empleo y trabajo.

Es una movilización sindical contra un gobierno que ha hecho de su política de empleo, un juego de artificio estadístico que sacrifica en el altar de la cantidad y los altos beneficios empresariales: estabilidad, seguridad, protección social, negociación colectiva. En definitiva, todo cuanto garantiza la dignidad del trabajo.

Es una marcha contra la política social de un gobierno que concibe el diálogo social, como un instrumento sólo plausible al servicio de sus objetivos políticos, económicos y sociales, y que convierte su gestión en actos de autoridad frente a la reivindicación, la propuesta y a la protesta social.

Es evidente, que desde la huelga general del 20 de junio el Gobierno ha perdido un tiempo precioso para reconducir y avanzar en el diálogo social. Es evidente que en este tiempo nunca ha estado, ni está en el ánimo del Gobierno del señor Aznar escuchar y atender las demandas mayoritarias de las trabajadoras y trabajadores de nuestro país. Es evidente que esta 'sordera patológica' es fruto de una estrategia planificada y orquestada poco admisible en un Estado democrático y de derecho como el nuestro.

Una estrategia que las trabajadoras y trabajadores de Andalucía vamos a romper marchando hasta Madrid, en la legítima defensa de nuestros derechos, en la legítima defensa de nuestra dignidad.

Manuel Pastrana Casado es secretario general UGT-A