Alicante soterrará su principal acceso por carretera para evitar los atascos

La inminente apertura de un gran centro comercial en el barrio alicantino de la Goteta aumentará la ya alta densidad de tráfico rodado que soporta la Avenida de Dénia -carretera de Valencia-, principal acceso a la capital alicantina. El Ayuntamiento de Alicante, sustentado por el PP, aprobó ayer en pleno, con unanimidad de todos los grupos políticos, el llamado Plan Especial de la Avenida de Dénia. El proyecto prevé convertir en subterráneo el tramo del citado vial que transcurre desde el barrio la Goteta hasta la intersección con la Gran Vía y el enlace con la autovía.

El alcalde de la ciudad, Luis Díaz Alperi, dijo tras la sesión plenaria que con esta actuación se pretende evitar que el tráfico sea 'caótico' en esta zona. De esta forma, la circulación con dirección hacia la autovía no interferirá con el tráfico de los alrededores. El primer edil se apresuró a señalar que buscará 'de donde sea' la financiación para ejecutar el proyecto. 'O se soterra ese tramo o el colapso de tráfico será insoportable', resaltó el regidor.

El pleno dio luz verde a la exposición pública de nueve modificaciones puntuales del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), entre las que destacan la recalificación de un terreno en la zona de El Palmeral, al sur de la ciudad, para reservarlo a la construcción del segundo hospital público del municipio, y la conversión de la zona de Gran Vía en un eje comercial.

Licencias suspendidas

La sesión plenaria de ayer aprobó, por otro lado, mantener un año la suspensión de licencias de apertura para nuevos negocios en el centro tradicional de Alicante. Este núcleo urbano acumula un gran número de comercios regentados por magrebíes. El PP en solitario rechazó así el recurso interpuesto por la Asociación Cultural Hispanoargelina Las Dos Orillas contra el acuerdo de congelar las aperturas, aprobado el pasado marzo. 'No tiene nada que ver ni con el racismo ni con la xenofobia', remarcó Díaz Alperi. 'Lo que se pretende', agregó, 'es impedir que se instalen comercios indiscriminadamente que perjudiquen a los otros puntos de venta de la zona'.

La mayoría de votos del PP permitió también sacar adelante la subida en un 10% del bonobús y del billete ordinario. El grupo municipal socialista, que votó en contra de la propuesta junto con Esquerra Unida y el Grupo Mixto, recalcó que con esta subida Alicante pasa a liderar las ciudades 'más caras' en el uso del transporte público.

Blas Bernal, portavoz del PSPV en el Ayuntamiento y candidato a la alcaldía, recriminó al PP la subida por segundo año consecutivo de las tarifas del transporte urbano. 'La medida será ventajosa para la ciudad de Alicante', le replicó el primer edil. Díaz Alperi precisó que el nuevo convenio con Masatusa, la empresa concesionaria del transporte urbano, favorecerá la implantación de nuevas líneas.