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Los dueños de las gasolineras presionan al Gobierno para que les deje vender vino

La patronal madrileña CEIM pide a la Comunidad que modifique la 'ley antibotellón'

La Ley de Drogodependencias y otros Trastornos Adictivos que el PP aprobó en solitario el pasado 20 de junio, en plena huelga general, ha generado un fuerte malestar entre los propietarios de las gasolineras de la región. Éstos se declaran 'asfixiados' desde que entró en vigor esta normativa, conocida como ley antibotellón, que les impide vender bebidas alcohólicas. Su situación se complica, dicen, por la subida de un céntimo en el precio del carburante desde el pasado 1 de agosto. Los gasolineros aseguran que el Gobierno regional les prometió modificar la ley para permitir la venta de, al menos, cerveza y vino. 'Pero no nos fiamos', aseguran. La Comunidad no confirma ni desmiente tal versión.

Lo que se vislumbra a medio plazo es una dura batalla que los propietarios de las 508 estaciones de servicio de la región no están dispuestos a perder. Prueba de ello es que ya han anunciado su intención de cerrar por las noches ante la complicada situación económica que, dicen, supone la prohibición de vender alcohol, a lo que se suma el céntimo sanitario, un impuesto que aumenta en un céntimo de euro el precio del carburante y que sólo rige en Madrid. Suprimir el turno nocturno supondría eliminar unos 250 puestos de trabajo de los 2.000 que hay en el sector.

Desde que se comenzó a tramitar la ley seca, los gasolineros, según explica Alejandro Moratilla, el portavoz de la Asociación de Empresarios de Estaciones de Servicio de Madrid, hicieron esfuerzos para impedir que la prohibición de vender bebidas alcohólicas en sus establecimientos siguiera su curso. Entre otras cosas argumentaron que, en su opinión, se trataba de una medida injusta porque con ésta, los hipermercados pueden vender bebidas alcohólicas hasta las 22.00 y, además, ahora ofrecen descuentos en sus gasolineras por las compras que allí se efectúen.

La oposición (PSOE e IU) tenía la sospecha de que el PP acabaría cediendo a la presión de los gasolineros. Pero el 20 de junio, con sólo los votos del PP, quedó aprobada esta normativa en la Asamblea regional.

Ahora, Moratilla asegura que el Gobierno regional ha ofrecido verbalmente levantar la prohibición que pesa sobre las gasolineras, a través de una modificación que se incluiría en la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos de la Comunidad para 2003. Así, podrían vender bebidas alcohólicas de menos de 20 grados (vino y cerveza). Desde el Gobierno regional ni se confirma ni se desmiente tal versión.

Presión de la patronal

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Fuentes del Ejecutivo, sin embargo, reconocen que modificar la ley antibotellón a través de la Ley de Acompañamiento de los Presupuestos regionales, es posible. Pero esa opción, de momento, no está considerada. El Gobierno regional puede, además, esperar a la entrada en vigor de la ley seca que está tramitando el Ejecutivo central y adaptar a Madrid esta normativa que sí permite vender en las gasolineras bebidas alcohólicas de 20 grados o menos, pero en un horario establecido por las comunidades y los ayuntamientos. Dicha ley, sin embargo, sólo podría ver la luz el próximo año, pues en este momento es sólo un anteproyecto.

La presión de los empresarios es tal que el propio presidente de la patronal Confederación Empresarial de Madrid (CEIM), Gerardo Díaz Ferrán, ha intervenido para buscar una solución favorable al sector. 'Hay grandes superficies comerciales que venden alcohol y que tienen gasolineras y eso constituye un gran problema', señala un portavoz. La actitud del Gobierno regional, dice este portavoz , 'ha sido positiva'. 'La Administración regional es consciente de esta situación. Esperemos que la respuesta sea positiva'. Pero entre los empresarios reina la duda. Y por eso mantienen su amenaza de cerrar por las noches las 508 gasolineras de la región, amparada en que la Ley de Comercio les otorga libertad de horarios y ninguna normativa, según dicen, les obliga a abrir sus establecimientos por la noche.

'De lo único que podrían acusarnos sería de cierre patronal, pero entonces la situación ya se desbordaría', sentencia Moratilla. Tan sólo en el mes de agosto, este sector dejó de ganar entre 10 y 12 millones de euros, según los cálculos de la patronal, a causa de la ley seca y de la implantación del céntimo sanitario (eso hace que muchos transportistas prefieran repostar en las provincias limítrofes). 'Pese a que nos han prometido un cambio en la ley, no nos fiamos de este Gobierno. Lo que le ocurre al PP es que no quiere reconocer que se ha equivocado', concluye Moratilla.

Los transportistas repostan en Toledo

Las estaciones de servicio de la región no son las únicas afectadas por la entrada en vigor del céntimo sanitario (el impuesto que incrementa en un céntimo de euro el combustible y con el cual el Gobierno regional quiere mejorar la sanidad). Los transportistas también se han visto afectados por esta medida, ante la cual muchos han decidido repostar en provincias limítrofes como Toledo, Cuenca y Guadalajara, donde les resulta más barato.

Este sector, según Eugenio Gómez, secretario de Atradice, una de las organizaciones que agrupa al transporte de mercancías, asegura que repostar en Madrid supondrá al sector una media de 43 millones de euros más cada año. 'Es verdad que el precio del combustible siempre ha sido una o dos pesetas más caro en Madrid con respecto a otras provincias, pero con el céntimo sanitario ya nos hemos visto obligados a optar por suministrarnos en otras regiones', explica.

La tendencia ahora, señala el secretario de Atradice, es que las empresas se pongan en contacto con distribuidores de otras zonas para que les traigan el combustible a esta región, con lo que evitan utilizar las estaciones de servicio madrileñas.

La situación se complica, insiste Gómez, porque los transportistas no pueden repercutir en sus precios el impuesto sanitario. 'Y el combustible representa el 30% del coste de explotación de un vehículo'.

Las empresas de transporte han acudido a la Consejería de Hacienda para analizar las consecuencias que les acarrea el céntimo sanitario. De momento, según Gómez, se han reunido con el viceconsejero de Hacienda, Enrique Ossorio Crespo, quien les ha explicado el esfuerzo que supone para la Comunidad asumir las transferencias sanitarias y la necesidad del tributo. 'Nos hemos encontrado con una subida sin recibir nada a cambio. Por eso nos dijo que estudiaría la situación'. En la región, según Atradice, hay unos 107.000 vehículos de transporte, repartidos entre mercancías y viajeros. Esta organización agrupa a unas 600 empresas especializadas en el traslado de mercancías, lo que supone unos 7.000 vehículos.

La decisión de muchos transportistas de no repostar combustible en Madrid forma parte de los argumentos que esgrimen los empresarios de estaciones de servicio para evidenciar el impacto que tiene sobre sus negocios no sólo la ley antibotellón, sino también el céntimo sanitario.

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