Llega la mensajería multimedia

Ya se pueden enviar desde el teléfono móvil mensajes multimedia o MMS, que incorporan imágenes junto a la voz y el texto. El operador Amena introdujo el servicio en julio y desde septiembre lo ofrece también Telefónica Móviles. Vodafone aún no lo ha anunciado, aunque se espera que esté disponible antes de fin de año.

La tarifa es de 0,6 euros por mensaje MMS en el caso de Telefónica, frente a 0,15 euros de los mensajes de texto tradicionales. Estos días el coste es más bajo porque el nuevo servicio está en promoción.

Para enviar un mensaje multimedia se necesita un terminal preparado para ello. El mensaje se puede recibir, en cambio, con cualquier teléfono móvil WAP. La imagen, obviamente, se ve en blanco y negro, pero se puede ver y escuchar la voz y leer el texto. Los usuarios de teléfonos móviles muy antiguos, que no sean WAP, recibirán un aviso y la dirección de que les ha llegado un mensaje MMS para poder leerlo después desde Internet con un ordenador.

De momento, sólo el Nokia 7650 y el SonyEricsson T68i están homologados. Su precio es elevado, unos 600 euros, pero se espera que en el primer trimestre del año que viene haya terminales MMS que cuesten en torno a los 200 euros. Nokia ha comunicado que a partir de final de año todos los nuevos modelos que introduzca serán MMS. Esto, se supone, espoleará a la competencia y el precio de los terminales MMS irá rápidamente a la baja hasta aproximarse a los actuales WAP.

La creación de un mensaje multimedia con el Nokia 7650 es sumamente sencillo, porque lleva la cámara integrada. Es cuestión de disparar, hablar, añadir el texto que se quiere y el teléfono envía el mensaje al número marcado. También se puede acceder a una zona privada de Internet que reserva la operadora para depositar imágenes y enviarlas cuando se quiera, así como incluir en el mensaje cualquiera de las imágenes que las operadoras colgarán de la red para facilitar la composición de mensajes.

La respuesta del público es una incógnita. Dependerá, reconocen fuentes de Telefónica, de la evolución del precio y de la disponibilidad de los terminales, aunque la operadora piensa que tiene muchas posibilidades de convertirse en una alternativa a los actuales mensajes cortos, porque ofrece una comunicación mucho más rica.

Todos los terminales MMS son GPRS, con lo que el éxito de la mensajería multimedia puede llevar aparejada la transmisión de datos de todo tipo a alta velocidad. La paradoja es que su uso masivo haría más difícil el despegue de la tercera generación (UMTS) al evidenciar que ya es suficiente la mejora de GSM.