Las ETT quieren 'complementar' al Inem
Los sindicatos temen que esté gestándose 'una privatización encubierta' del Instituto Nacional de Empleo
Las empresas de trabajo temporal (ETT) han empezado a buscar fórmulas de convergencia con el sector público. Sin armar ruido, y sin dar nombres de las administraciones implicadas, la patronal que agrupa a las siete grandes compañías del sector en España, AGETT, ha entrado en contacto con varias comunidades autónomas para estudiar planes piloto de colocación de parados de larga duración. 'Es la tendencia mundial y estoy convencido de que este tipo de políticas se llegarán a afianzar en nuestro país', afirmaba José Ramón Caso, presidente de la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal, tras su intervención en el seminario La nueva España laboral, celebrado esta semana en los cursos de verano de la Universidad Complutense en San Lorenzo de El Escorial (Madrid).
La patronal AGETT ha entrado en contacto con varias comunidades autónomas para estudiar planes piloto de colocación de parados
El presidente de las grandes empresas de trabajo temporal cree que el modelo a seguir es a través de una convocatoria pública
Caso, ex vicepresidente del Congreso de los Diputados y ex secretario general del CDS, apuesta por una reforma legal que renueve el papel que las ETT tras casi 10 años de vida legal. Al hilo de la reforma laboral del Ejecutivo del Partido Popular y del Informe Hartz sobre empleabilidad que quieren aplicar en Alemania tras las elecciones de otoño, Caso cree que hay que darles la alternativa.
'El sector público es muy poco eficiente como creador de empleo', comenta el presidente de AGETT, 'por lo que estamos seguros de que siempre hará mejor el trabajo una empresa privada'. Su modelo no es otro que el aplicado por la fundación que gestiona la formación continua. Ésta 'saca sus planes de empleo, las empresas de formación hacen sus ofertas y las elegidas reciben los fondos y dan los cursos. Pensamos que puede aplicarse un modelo similar para la gestión de la empleabilidad', explica. La reforma alemana pretende crear una suboficina de empleo que funcione 'como ETT pública', asegura Caso.
'Nosotros ya veníamos advirtiendo de que con la reforma del Inem se va a producir su privatización encubierta, a base de subcontrataciones', dice Carlos Martín, economista del gabinete técnico de CC OO. 'Si desde el Inem se habilitan recursos adicionales para la búsqueda de empleo, la gestión debe hacerse desde el sector público, con presencia y control por parte de los agentes sociales', subraya.
Martín recalca que la solución está en que el Inem cumpla con su función de ayudar a encontrar trabajo, un objetivo lastrado en su opinión 'por las limitaciones con las que se topa, al tener que lidiar con un mercado de trabajo precario, con muchos empleados temporales y una gran rotación laboral, lo que implica que el Inem esté registrando del orden de 14 millones de contratos anuales, es decir, que debe destinar la mayor parte de su tiempo y de sus recursos a tareas burocráticas'.
En parecidos términos se pronuncian en UGT. Josefa Solá, su secretaria ejecutiva, recuerda que las ETT fueron creadas para satisfacer unas demandas de empleo muy precisas. Por ello, considera que estas empresas, que tienen ánimo de lucro, no están autorizadas a suplir o complementar al Inem. Para Solá, tampoco 'deben cubrir una función que pertenece en exclusiva al sector público'.
Políticas de atracción de emigrados
El mercado laboral español va a reclamar a medio plazo políticas activas de atracción de emigrantes para puestos manuales (blue collar), asegura Alfonso Jiménez, director general de la consultora Watson Wyatt. Jiménez apunta como posible solución la puesta en marcha de campañas públicas de atracción de españoles emigrados, especialmente entre los residentes en América Latina, 'algo que se ha implantado ya de forma muy fuerte en Italia'. La llegada de extranjeros, en la que José Ramón Caso ve una oportunidad para que las empresas de trabajo temporal demuestren su eficiencia, ha sido uno de los asuntos tratados en el seminario La Nueva España Laboral. 'La inmigración', expone el presidente de la patronal AGETT, 'es una parte creciente de la oferta laboral y requiere unas tareas específicas que eviten el fraude y la inadaptación. La gestión de este colectivo exige talento y complejidad, algo que las ETT pueden ofrecer como entidades colaboradoras del Inem. Se conseguiría así cualificar a este sector laboral, facilitar su integración y que funcionara legal y racionalmente'.
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