El Bus de la Fiesta

Ir de marcha y beber en exceso no es sinónimo de riesgo al volante para numerosos jóvenes de varios municipios de las comarcas de la Selva y el Gironès. Desde agosto del año pasado, un autobús nocturno les traslada a las fiestas y locales de ocio de la zona y les retorna a casa.

Unos 750 jóvenes han utilizado ya el denominado Bus de la Fiesta, un servicio pionero creado por el Consejo Comarcal de la Selva y varios ayuntamientos, con el apoyo de la Secretaría General de la Juventud de la Generalitat, con el objetivo de evitar las trágicas consecuencias que a menudo se derivan de la combinación de la noche, el alcohol y la carretera.

Desde su puesta en funcionamiento, el denominado Bus de la Fiesta ha realizado 13 rutas distintas, con varias paradas, según el calendario de fiestas de la zona.

El responsable de juventud del Consejo Comarcal de la Selva, Xavier Pla, juzga muy positiva la respuesta que han dado los jóvenes de la zona a la puesta en funcionamiento de este nuevo servicio de autobús, no sólo por el número de usuarios. 'El comportamiento cívico de los jóvenes, que nos preocupó en un principio, también es bueno', asegura Xavier Pla.

La idea se empezó a gestar en el verano del año 2000, a raíz de varios accidentes en los que murieron varios jóvenes de Santa Coloma de Farners y Sils, unos siniestros que causaron gran consternación en estas poblaciones. Además de trasladar a los jóvenes a las fiestas, el proyecto pretende fomentar la relación entre ellos y realizar una labor de concienciación para que la juventud mantenga hábitos saludables. Lo deja muy claro la inscripción que puede leerse en los vasos reciclables que se reparten a los usuarios del transporte: 'No te bebas el entendimiento'.

Durante el recorrido se proponen juegos de palabras para informar a los jóvenes sobre las conductas de riesgo. Una vez en la fiesta prima la diversión, pero son muchos los jóvenes que, atraídos por la curiosidad o por el interés, se acercan a la denominada Paradeta de la festa, una oficina de información ambulante, donde voluntarios del programa Som.nit de Cruz Roja, de la Asociación Catalana Antisida y agentes de salud ofrecen respuestas sobre los temas que preocupan a los jóvenes, como las conductas sexuales, el sida y las drogas. Esta oficina tiene igual o más aceptación que el Bus de la Fiesta. Las 2.000 consultas efectuadas a lo largo de este año lo demuestran.

Pese a que el balance del primer año del servicio de autobús nocturno es en general positivo, sus responsables admiten que no ha logrado del todo atraer a los jóvenes que ya tienen el permiso de conducir, que siguen utilizando su vehículo para salir por la noche. La mayoría de los usuarios del Bus, reconoce Xavier Pla, son chicos de 16 y 17 años que no tienen todavía el carné.

El Bus de la Fiesta ya ha interesado a ayuntamientos de otras comarcas gerundenses y a otros consejos comarcales, que han solicitado información para imitar la iniciativa. Ahora, según explica Xavier Pla, el reto más importante para el próximo año es poder acercar a los jóvenes del Gironès y de las zonas de interior de la Selva a la parte marítima de la comarca, donde se hallan las poblaciones más turísticas de la comarca, como Lloret de Mar, Tossa y Blanes, que especialmente en verano concentran una amplia oferta de ocio nocturno.