Insólita espantada en Menorca de los 110 músicos de la Joven Orquesta Nacional de Alemania

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110 músicos de la Joven Orquesta Nacional de Alemania abortaron el lunes por la noche, en el Polideportivo municipal de Ciutadella, Menorca, su actuación al asegurar que no podían seguir tocando debido a los supuestos efluvios tóxicos de la pintura usada para decorar el escenario en el que interpretaban su repertorio. Dijeron que se había usado un 'licor venenoso' y dieron la espantada. La cancelación del concierto -y la anulación del segundo previsto- ha indignado a la organización, Juventudes Musicales de Ciutadella, que niega los argumentos de los artistas sobre el olor y la nocividad del esmalte usado y cree que éstos 'no tenían fuerza para actuar debido a sus excesos festivos'.

Lunes 12 por la noche: ochocientas personas que han pagado entre 20 y 25 euros asisten al primero de los dos conciertos programados de la Joven Orquesta Nacional de Alemania en el XXX Festival de Música de Verano de las Juventudes Musicales de Menorca. La formación musical, con 110 integrantes entre 18 y 22 años, interpreta la primera pieza del programa, Preludio de los Maestros Cantores de Nuremberg, de R. Wagner, y, al finalizar, los integrantes de la sección de viento y metal abandonan el estrado. El director de la formación se dirige al público, que, desconcertado, escucha la explicación: 'No podemos seguir actuando. Yo tengo la responsabilidad de la formación y de la salud de estos jóvenes, y ellos no pueden ponerse en riesgo en pleno esfuerzo porque se ha pintado con 'licor venenoso' el escenario. No podemos actuar'.

Andreu Torres, presidente de la entidad organizadora, explicó su frustración. 'La Joven Orquesta Nacional nos ha dado problemas con sus exigencias desde que llegó'. Torres insistió: 'El piso no huele y los espectadores lo han comprobado. La policía ya tuvo que acudir donde se hospedaban los músicos jóvenes por los incidentes que ocurrían debido a los excesos del alcohol. Creo que no tenían fuerza para actuar. No pagaremos el caché por incumplimiento de contrato. Resulta indignante y es una tomadura de pelo'.

El conjunto orquestal de la RFA percibía 25.000 euros por dos actuaciones y su desplazamiento a la isla de Menorca, único punto de España donde debían intervenir tras anularse, por las tempestades de verano, el concierto programado en el Festival de Torroella de Montgrí.