La inflación interanual se mantiene en el 3,4% en julio gracias al impacto de las rebajas
Los precios del sector servicios ceden sólo una décima pese a la menor presión de la demanda
Los precios bajaron un 0,7% en julio respecto de junio, gracias a las rebajas, pero la inflación de los últimos 12 meses se mantuvo en el 3,4%, igual que en junio. La situación no mejora, pese a la menor presión de la demanda en sectores como el turismo. Los precios de viajes organizados, hoteles, bares y restaurantes apenas ceden una décima respecto de junio, igual que el conjunto del sector servicios. La gasolina es otro de los focos de presión, y el que previsiblemente dará más problemas en lo que queda de año. Sin energía y alimentos frescos, la denominada inflación subyacente se beneficia de las rebajas en vestido y calzado y el recorte en servicios, y su tasa anual cae al 3,8%.
Los datos publicados ayer por Estadística no dan para muchas alegrías. La inflación se mantiene en el 3,4%, no empeora respecto de junio, pero el estancamiento de la actividad económica debería dar mejores resultados en precios. Los analistas prevén que la actividad económica a duras penas alcanzará un crecimiento del 2% este año, pero estiman que los precios se dispararán hasta el 4%, el doble del objetivo oficial.
Respecto de junio, el IPC ha caído siete décimas, gracias a los productos rebajados. La tasa interanual se mantiene en el 3,4%, porque se compara con julio del pasado año, en que también hubo rebajas. La tasa mensual cae ese 0,7% porque se compara con junio de este año, un mes sin rebajas. Las prendas de vestir y el calzado han tenido reducciones importantes (el 9,2% y el 7,5%) respecto de junio.
Las subidas de mayor impacto se han producido en los viajes organizados (5,3%) y los hoteles (8,7%). Los alimentos frescos se han disparado un 0,8%, en especial cordero (5,1% en el mes), pescado (1,7%), cerdo y pollo (1,4%), mientras bajó la patata (un 2,2%). Los alimentos elaborados han aumentado sólo un 0,1%, aunque siguen al alza aceite, pan y lácteos.
La situación no es mucho mejor en Europa, aunque los principales países de la zona euro se encuentran en niveles bastante más bajos. En Alemania, por ejemplo, la inflación se ha acelerado del 0,8% de junio al 1% en julio; en Francia se ha pasado del 1,4% al 1,6%; y en Italia se ha mantenido en el 2,2%. En España, el IPC armonizado ha aumentado una décima, hasta el 3,5%, y lo más probable es que el diferencial con la zona euro se haya mantenido en 1,6 puntos, un nivel alto.
El problema común entre estos países es que el precio del petróleo arrancó el año a un precio medio de 19,4 dólares barril y llegó a julio a 25,7 dólares. Además, en julio comienzan las vacaciones masivas en España y las petroleras suben precios. Respecto de junio, las gasolinas y gasóleos han aumentado un 0,4%, y la variación anual da aún un descenso del 2%, anque inferior al 5,8% de junio.
Ésta es la principal amenaza para la inflación de lo que queda de año, porque en la segunda mitad de 2001 empezó el recorte de precios de las gasolinas. El IPC es una comparación y en este caso significa que se tienen que reducir mucho los precios de la energía en el resto de 2002 para que la tasa anual siga dando negativa en carburantes y combustibles.
A favor está que el ciclo económico no acompaña y esto debería contribuir en mayor medida a que las empresas reduzcan precios. Ha ocurrido en julio, pero de forma muy leve, en el sector servicios. Su tasa anual apenas se ha recortado una décima (hasta el 4,7%), debido a que en viajes organizados (del 10,7% al 8%), restaurantes (se mantiene en el 5,9%) y hoteles (del 5,4% al 4,7%) no se han recogido aún las ofertas de última hora por la caída de la demanda. El conjunto del turismo cede sólo una décima en su tasa anual, hasta el 5,8%.
La menor presión del sector servicios y de algunos precios industriales, como la ropa y el calzado, ha aligerado la inflación subyacente o estructural. Sin energía y alimentos frescos, este índice ha reducido su tasa anual desde el 4,1% de junio hasta el 3,8% en julio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.