_
_
_
_

La tensión vuelve a los mercados en Brasil, pese al apoyo del FMI

Lo que parecía imposible ocurrió: a pesar del apoyo financiero del Fondo Monetario Internacional (FMI), los mercados brasileños vuelven a vivir jornadas enloquecidas. Ayer, debido a nuevos sondeos electorales que supuestamente alejan de la victoria en las elecciones de octubre próximo el candidato preferido de los mercados, el oficialista José Serra, el dólar se revalorizó frente al real un 3,44%, cotizándose a 3,12 reales; la Bolsa de São Paulo se desplomó un 2,76% y la tasa de riesgo-país del banco JP Morgan escaló hasta los 2.219 puntos (tercero mayor riesgo del mundo, sólo superado por Argentina y Nigeria).

Mientras, los principales títulos de la deuda externa (los C Bonds) se negociaban a 54 dólares frente a un valor nominal de 100, marcando récords de caída desconocidos en los últimos cuatro años.

El respaldo del FMI, por un valor total de 30.000 millones de dólares en 15 meses (6.000 millones en dos tramos, septiembre y noviembre, y el resto pagadero en 2003), no ha surtido el efecto deseado. El acuerdo, clasificado en un primer momento por el presidente del Banco Central, Arminio Fraga, de 'espectacular', y descrito por el presidente Fernando Henrique Cardoso como 'el oxígeno que nos faltaba', parece haber funcionado un solo día, el pasado jueves. Ya el viernes el dólar volvió a subir, y ahora nadie se arriesga a prever el futuro inmediato.

Dólar en ascenso

Ayer, ya en la apertura del mercado, el dólar dejó claro que volvía con fuerza total frente a un real respaldado solamente por discursos optimistas y el anuncio de que la primera cuota del préstamo del FMI llegará en un mes. Tras la demostración de fuerza del mercado (y de fragilidad de la moneda brasileña), Arminio Fraga anunció que las intervenciones directas del Banco Central podrán volver 'en cualquier momento'. Y eso es exactamente lo contrario de lo que el mismo Fraga anunció formalmente, entre sonrisas y afirmaciones de confianza, el pasado jueves.

Desde mediados de julio, cuando las turbulencias sacudieron los cimientos de la economía brasileña, el Banco Central venía inyectando un promedio de 200 millones de dólares por día en el mercado, cantidad cuatro veces superior a la anunciada ración diaria de 50 millones de dólares. El pasado jueves, la intervención diaria fue oficialmente suspendida. Pero ayer, la mayoría de los operadores de cambio reclamaban que el banco utilizara su poder de fuego y criticaban la inactividad de las autoridades.

En un intento de tranquilizar los ánimos, el ministro de Hacienda, Pedro Malan, reiteró que no existen 'problemas estructurales' en la balanza de pagos. Según Malan, el superávit comercial deberá alcanzar los 6.000 millones de dólares este año, superando la meta prevista con el FMI, de 5.000 millones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_