Artur Mas ha gastado este año 37 veces más en publicidad institucional que en 2001

El Departamento de Presidencia, que dirige el conseller en cap, Artur Mas, lleva gastado hasta la fecha en publicidad institucional 37 veces más que en años anteriores. Desde el 1 de enero, Presidencia ha invertido en propaganda 7,9 millones de euros (1.330 millones de pesetas) cuando la inversión global en los años 2000 o 2001 no alcanzó los 438.000 euros (72,8 millones de pesetas).

De los 7,9 millones de euros del último semestre, el 25% se ha dedicado a publicitar la obra del Gobierno catalán, a tan sólo un año de las elecciones autonómicas en las que Mas concurre por primera vez como presidenciable de CiU.

Si Presidencia continúa con el mismo ritmo inversor, a final de año habrá desembolsado en publicidad institucional 15,9 millones de euros, lo que significará 37 veces más que el montante global de los años 2001 o 2000. Durante los dos últimos ejercicios, cuando Mas todavía no había sido designado candidato de CiU a la presidencia de la Generalitat, este departamento empleó en publicidad 437.000 euros cada año. Una cifra que apenas sirvió para anunciar en la prensa extranjera el Día del Libro, el 23 de abril; una campaña de parques naturales; dar a conocer la exposición Cataluña, hoy, y para insertar publicidad institucional en el semanario valenciano El Temps.

Una vez que Artur Mas fue designado conseller en cap, Presidencia pasó a controlar toda la publicidad institucional del Gobierno catalán excepto la promoción turística, que sigue en manos del consejero de Industria, Antoni Subirà, uno de los pesos pesados del Ejecutivo. Pero el volumen propagandístico de la Generalitat en el último semestre no tiene parangón con años anteriores.

Desde el 1 de enero, Presidencia ha licitado o adjudicado un total de 22 campañas publicitarias, según consta en el Diario Oficial de la Generalitat, en las que ha invertido algo más de 7,9 millones de euros. La creatividad y planificación de cada campaña cuesta alrededor de 120.200 euros mientras que la inserción en los medios de comunicación (prensa, radio y televisión) supone entre cuatro y cinco veces más esta cifra. Así ocurre en campañas como la del modelo educativo, la del respeto al medio ambiente, la de prevención de incendios forestales o la de la juventud.

Frente a algunas campañas con un presupuesto ajustado, en otras la inversión se dispara considerablemente. Los espacios informativos que protagonizó Andreu Buenafuente sobre el euro, emitidos por Televisió de Catalunya, costaron a la Generalitat 812.207 euros, algo más de 135 millones de pesetas. Y los anuncios para captar mossos d'esquadra significaron para las arcas públicas un desembolso de 594.000 euros, el doble que en 2001.

La oposición parlamentaria considera habituales e incluso necesarias este tipo de campañas de sensibilización social, como por ejemplo la que sirvió para diferenciar el uso de los teléfonos 012 -de información general- y 112 -de emergencias-, números que la población suele confundir. Pero en cambio, el bloque de izquierdas ha puesto varias veces el grito en el cielo por los gastos, desmesurados a su juicio, que Presidencia dedica a promocionar la obra de gobierno. El PSC incluso denunció el trasvase a Presidencia de partidas presupuestarias pertenecientes a departamentos como Gobernación o Enseñanza.

Explícitamente para difundir la acción del Ejecutivo catalán, Presidencia ha gastado 1,13 millones de euros durante este semestre. Alguna de las iniciativas en este sentido es la campaña sobre los retos de futuro de Cataluña o una revista trimestral que se distribuye a todas las familias catalanas.

Si se considera autopromoción la campaña sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, pactado por el Gobierno de CiU, o la publicidad sobre las ayudas familiares que concede el Ejecutivo, el montante se dispara hasta 1,99 millones de euros.

En 2001, el gasto en publicidad institucional de todos los departamentos de la Generalitat ascendió a 1,97 millones de euros, según consta en los anuncios publicados en el Diari Oficial de la Generalitat. Este montante supone la cuarta parte de lo que ha desembolsado Presidencia durante este primer trimestre, a pesar de que ahora el Departamento de Artur Mas aglutina la gestión de toda la propaganda institucional del Gobierno catalán.

El año pasado, el Departamento de Medio Ambiente, dirigido entonces por Felip Puig, fue el que registró una mayor inversión en publicidad, con un total de 698.600 euros, unos 200.000 más que Presidencia. Puig encargó campañas sobre el abandono de animales, el Día Europeo sin Coches o un plan con una duración de dos años contra la contaminación acústica.

'Contra la ley'

David Madí, secretario de Comunicación y, por tanto, máximo responsable de la publicidad institucional del Gobierno, considera ajustadas estas cifras de inversión en propaganda, sobre todo, asegura, si se comparan con las que destinan otras administraciones, en especial el Ayuntamiento de Barcelona, a este mismo fin.

Madí subraya el estricto control que existe sobre este tipo de campañas a partir de la entrada en vigor de la ley que regula la publicidad institucional, por cuya comisión pasan todas las iniciativas del Ejecutivo catalán y no -añade- las que impulsa el Ayuntamiento de Barcelona o la Diputación, gobernadas por los socialistas. Madí advierte de que habrá que corregir esta circunstancia a partir del mes de septiembre. 'Hay un régimen de transparencia absoluto, lo que no ocurre en el Ayuntamiento o la Diputación de Barcelona, que actúan de forma deliberada contra la ley', manifestó a este periódico.