Un cabaré para Mario Gas

Entre los espectáculos más teatrales que propone esta edición del Festival Castell de Peralada se encuntra el Cabaré literario que Mario Gas estrena el día 16 con las ocho canciones de Schönberg y nueve escritas para la ocasión por Félix de Azúa, Enrique Vila-Matas, Quim Monzó, Manuel Vázquez Montalbán, Javier Tomeo, Albert Boadella, José Sanchís Sinisterra, Narcís Comadira y David Trueba, y por tres compositores catalanes jóvenes. 'La música da alas a la lengua y, ahora que los idiomas están en lucha unos con otros, puede ser una ayuda valiosa para la difusión del castellano y del catalán', explica Luis Polanco, asesor musical de Peralada y responsable de esta iniciativa: 'El año pasado, como inauguración del Festival de Otoño de Madrid, Ute Lemper cantó un repertorio de temas en muchos idiomas, salvo en castellano. Por eso, cuando el pianista Emili Brugalla y la soprano Uma Ysamat me propusieron hacer en el festival los brettlieder de Schönberg, que son canciones de cabaré, pensé que sería buena idea encargar otras nueve a escritores y a músicos catalanes'.

Así pues, Polanco y Luis López de Lamadrid, director de Peralada, elaboraron una lista con nueve célebres autores literarios: 'Les pedimos que escribiera cada uno una canción, en castellano o en catalán, como prefiriesen. Ninguno puso la más mínima objeción, salvo Quim Monzó, que se negó en redondo, argumentando que no sabía hacer canciones. Pero como nos interesaba un texto suyo, convino en redactar un cuento brevísimo, El desconcert de l'arcàngel, pidiéndonos que en el programa de mano figurara como prosa. Enrique Vila-Matas dijo que en toda su vida sólo había compuesto un poema. Sin embargo, el que nos ha entregado es realmente brillante'.

Cada autor escogió el tema con libertad: 'Las canciones son muy diferentes y, en conjunto, ofrecen una visión interesante de nuestro tiempo. El público se llevará la colección completa en el programa de mano. David Trueba, por ejemplo, ha escrito un videoclip (La mujer de la cama rodante); Boadella, una metáfora de la droga (Himne al prozac); Sanchis Sinisterra se ha dejado seducir por una niña mujer en Amor a la infancia; Vila-Matas ha puesto un punto de vanguardia con La vida que me espera, y Vázquez Montalbán ha escrito un tango político, que habla mucho y no dice nada'.

El paso siguiente fue encar-

gar la música: 'Nos gusta hacer este tipo de proposiciones a compositores jóvenes. En esta ocasión seleccionamos a Alfonso Vilallonga, Xavier Albertí y Alberto García Demestres, que se han encargado de tres canciones cada uno, con un resultado variopinto. Las de Albertí son de una concisión absoluta; las de Vilallonga, las más cabareteras, y las de García Demestres son tres lieder, tres canciones muy bien desarrolladas, especialmente en la parte pianística'.

¿Y por qué le encomendasteis la puesta en escena a Mario Gas?: 'Porque es quien domina este género en España. Él ha escogido a las actrices. El espectáculo se abre con los brettlieder de Schönberg, interpretados por Ysamat y Brugalla, que se pueden encuadrar en la gran tradición liederística alemana del siglo XIX, aunque actrices como, por ejemplo, Maddalena Crippa, en un montaje de Peter Stein, o como Nina, los han recitado'.

El director ha dividido el cabaré en tres partes. 'La segunda, formada por las nueve canciones de nuevo cuño, es una apuesta del festival, que me parece muy saludable que se lleve a cabo', dice Mario Gas. 'Es como un melón, que hay que abrir para ver qué sucede. Habrá canciones que queden en el olvido y otras que posteriormente se incluyan en repertorio, pero, en esta época en la que sobreabundan las reposiciones, me parece bien que se dé este pequeño salto al vacío. Para finalizar, hay un bloque integrado por seis temas de Kurt Weill'.

Mario Gas, que hace años trabajó con Uma Ysamat, y que ha seguido su intensa labor en los espectáculos de Carles Santos, eligió a Mónica López, Vicky Peña y Teresa Vallicrosa para completar el reparto 'porque he trabajado con ellas en Brecht × Brecht y en mil cosas más, y respeto, admiro y amo su labor'.

Respecto al montaje, Gas no se ha metido en camisas de once varas: 'He intentado dar sentido a la interpretación y dejar que respiren las canciones: unas las dice una sola voz, otras se hacen a dúo, en trío o a cuatro voces. Siempre con sencillez, y dentro de una estructura muy simple. Lo importante es la comunicación entre los artistas y los 300 espectadores, que estarán sentados, tomando una copa relajadamente. Entre las mesas discurren unas pasarelas, y al fondo hay una gran cristalera'.

Los compositores están encantados de participar en este proyecto. García Demestres (Barcelona, 1960) ha musicado la Canción alemana, de Félix de Azúa, 'respetando su carácter filosófico y enrevesado'. Al Homenaje al tango, de Vázquez Montalbán, escrito en falso lunfardo, le ha puesto 'música de tango moderno' y en el poema de Trueba, se ha dejado guiar por lo que tiene de erótico. Xavier Albertí (Lloret de Mar, 1962) opina que el cabaré 'permite jugar con la parodia, la cita, la manipulación y la distorsión de materiales muy diversos', y que los poemas de Comadira, Vila-Matas y Monzó 'estaban pidiendo a gritos jugar de ese modo'.