La Junta y Urbanismo dan luz verde a Puerto Triana tras aceptar los promotores reducir la edificabilidad

El Ayuntamiento de Sevilla y los promotores del centro comercial y de ocio Puerto Triana han aceptado reducir la edificabilidad total del proyecto con tal de lograr ya el visto bueno de la Junta. El delegado de Urbanismo, Rafael Carmona, y la directora general de Ordenación del Territorio, Josefina Cruz, tienen previsto comparecer hoy conjuntamente para anunciar un acuerdo entre ambas partes que haga viable el proyecto, que actualmente se encuentra bloqueado por no adaptarse a las exigencias de la Junta.

Desde que el pasado mes de mayo la Consejería de Obras Públicas rechazara por tercera vez la tramitación del proyecto, Urbanismo y los promotores han acordado distintas modificaciones del diseño original para intentar acercar posturas con la Administración autonómica: construir una pasarela peatonal para facilitar el acceso y aliviar el tráfico; aumentar el espacio libre entre la ribera e incluso reducir en un tercio la superficie comercial prevista.

Pero ante las reticencias de la Junta, Urbanismo ha accedido a rebajar la edificabilidad del complejo, prevista en 128.000 metros cuadrados -72.890 de uso comercial, 15.000 para oficinas y un hotel y 40.000 de usos dotacionales, que incluirían la reutilización del Pabellón de la Naturaleza de la Expo 92 como centro cultural-.

'Es necesario un acuerdo entre responsables autonómicos y municipales', subrayó ayer Carmona, 'y si para eso hay que reducir la edificabilidad, pues adelante'. 'No tenemos posiciones maximalistas', advirtió el concejal, que se mostró convencido de que la obra estará en marcha en un plazo máximo de siete meses.

'Seríamos unos irresponsables si no conciliáramos nuestras posturas', advirtió Carmona, 'porque estaríamos perdiendo el momento idóneo para poner en marcha un proyecto de gran repercusión económica y que va a generar empleo para la ciudad'.

Fuentes de Obras Públicas confirmaron ayer el acuerdo, aunque no adelantaron su contenido. En su último informe, la Junta advertía al Ayuntamiento que si quería sacar adelante Puerto Triana como una modificación puntual del planeamiento vigente tendría que plantearse 'una reducción significativa' de la edificabilidad prevista en usos terciarios (comercial y oficinas).

El primer acuerdo que se plantearon Urbanismo y los promotores pasaba por bajar de los más de 72.000 metros cuadrados de tiendas a unos 48.000 y destinar la diferencia a oficinas y, en menor medida, a cines y otras ofertas de ocio, pero si tocar la edificabilidad total. Sin embargo, la Junta pretende que el volumen del proyecto final se quede en 44.795 metros cuadrados.

Otro de los puntos que deberá recoger el acuerdo que se hará público hoy será el referido a la torre de Bofill. La Junta insiste en que los promotores concreten su uso y advierte de que la altura máxima permitida es de 26 metros, frente a los 80 que contemplaba el proyecto original.