Una carga policial contra jóvenes en la fiesta de Torelló indigna a la oposición

Una carga policial durante la Porronada de Torelló (Osona), uno de los actos tradicionales de la fiesta mayor de esta localidad, ha generado la indignación de toda la oposición en el Ayuntamiento y de los padres de los jóvenes que participaron en la actividad festiva. Mientras los padres estudian denunciar a la Policía Local por la contundencia y brutalidad con la que consideran que actuaron los agentes, los concejales de la oposición (CiU, ICV e Independents per Torelló) han calificado de desmesurada la actuación policial y se plantean pedir la dimisión de la concejal de Seguridad Ciudadana y diputada socialista, Flora Vilalta.

Los hechos ocurrieron la madrugada del pasado viernes, cuando grupos de jóvenes participantes en la porronada -un recorrido festivo por los bares y calles de Torelló- se concentraron en la piscina municipal, adonde también se desplazaron dos coches patrulla de la Policía Local con siete agentes. Allí empezaron los enfrentamientos que se saldaron con tres detenidos y varios heridos por contusiones de porra.

Según la versión de los jóvenes, el incidente tuvo su desencadenante unas horas antes, cuando en mitad de la porronada, en la que participaban unas 400 personas, un coche patrulla había pasado por medio de la rúa y algunos participantes sacudieron el vehículo policial. Según el relato de los participantes, los agentes no dijeron nada en ese momento, pero fueron a por refuerzos y se dirigieron a la piscina, donde intentaron identificar a las personas que habían zarandeado el coche patrulla. Ahí empezaron los incidentes.

Uno de los organizadores del acto y testigo de la carga policial, Jordi Cubí, calificó ayer la actuación policial de 'dura, desmesurada y contundente'. Varios jóvenes tuvieron que ser atendidos de fuertes y violentas contusiones, según especifican algunos comunicados médicos a los que ha tenido acceso la regidora de CiU en el Ayuntamiento, Rosa Sayós. Tres jóvenes fueron detenidos. Dos de ellos quedaron en libertad la misma madrugada y un tercero fue trasladado a la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Vic, quienes lo dejaron en libertad. El padre de uno de estos detenidos ha criticado la carga policial, así como el trato que recibieron en comisaría. Según su relato, cuando fue a ver a su hijo lo encontró con las manillas puestas 'como si fuera un delincuente'. Este padre no descarta la posibilidad de denunciar a los agentes.

Los miembros dels Deixebles de Sant Feliu convocaron un acto de protesta el pasado domingo, en el que un centenar de jóvenes efectuó una pitada y profirió gritos contra la policía y la alcaldía.

Críticas de la oposición

El grupo municipal de CiU de Torelló considera que los agentes provocaron a los jóvenes. Según la concejal de CiU Rosa Sayos, la actuación policial 'fue excesiva y represiva'. Los concejales nacionalistas se plantean pedir la dimisión de la concejal de seguridad ciudadana, Flora Vilalta, como responsable política del incidente.

Por su parte, la concejal de ICV, Bet Font, señaló ayer que la actuación de la policía municipal no está justificada y que la actitud de los agentes 'en ningún momento fue de calmar los ánimos, sino que motivó más crispación y violencia'.