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Un joven trabajador muere en el Vallès Oriental al caerse de un andamio

Ya son 10 las víctimas mortales de accidentes laborales en 15 días

María Giu vive justo al lado de la obra. El pasado jueves, hacia las 12 del mediodía, hizo lo mismo que hacía muchas otras veces: pasar el rato mirando cómo trabajaban los albañiles de las obras del al lado. 'Vi cómo algo caía y al principio pensé que era el saco, porque el chaval estaba trajinando con uno. Pero oí los gritos. Así que pensé, ya está, se ha caído'. Era un joven de Granollers de 27 años, José R. G., que trabajaba para la empresa de su tío y que resultó muerto.

María Giu siempre suele llevar el teléfono encima. No se lo pensó dos veces y marcó el 088. 'Les supliqué: por favor, vengan y traigan una ambulancia. Hay un herido'.

Y María se fue corriendo al pie de la obra. 'Todos -es que había dos albañiles más- 'estaban muy nerviosos. El chico estaba en el suelo y le salía mucha sangre'. Los otros dos albañiles eran su tío y cuñado. 'Cuando llegué, estaban descompuestos'.

Giu está más que indignada. Entre Sant Celoní y la urbanización hay unos seis kilómetros. 'La ambulancia tardó 35 minutos, es vergonzoso. Eso sí que quiero denunciarlo. También tardaron en retirar el cuerpo del joven. 'Estuvo destapado mucho rato. Hasta que se lo llevaron, pasaron varias horas'.

Sin nada que lo atara

La muerte de José, de 27 años, ha añadido una nueva víctima a los accidentes laborales de los últimos días. Tras su muerte, ya suman 10 los muertos por accidentes laborales en menos de dos semanas. En los últimos días, cuatro albañiles autónomos que habían decidido trabajar juntos y se dedicaban básicamente a la construcción de torres sufrieron la misma suerte.

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José R.G estaba solo, subido en un andamio de seis metros de altura, 'sin nada que lo atara'. Se cayó y hubieran podido pasar horas antes de que alguien se diera cuenta de ello, dice Giu.

José trabajaba en una urbanización, Baronía, que forman unas 400 torres diseminadas, en el municipio de Vallgorguina (Vallès Oriental). Fue en la década de 1970 cuando se empezaron a construir las primeras casas, era y es el destino de veraneantes que buscan el descanso rodeados de montañas cubiertas de bosque. Durante todo el año deben residir en Baronía unas 30 o 40 familias. En verano, la cifra se multiplica.

Cuando llegó la ambulancia, José tenía muchas heridas sangrantes. 'El pulso estaba muy débil. Tenía un politraumatismo y había perdido masa encefálica', explica la policía autonómica. Al llegar la Unidad de Cuidados Intensivos móvil, 'el joven ya había muerto'.

Juan Doncel es el secretario comarcal de la construcción de CC OO en el Vallès Oriental. El jueves 'tuvimos un primer contacto con la familia, pero no quisimos forzar la situación, porque era dramática', dice.

'Estamos hartos'

El tío de José era también su jefe, el responsable de esta pequeña empresa de Granollers. A Doncel le ha afectado este accidente, se le nota cuando por enésima vez denuncia la precariedad que viven muchos de los trabajadores del sector. 'Estamos hartos, nos duele la boca' de tanto denunciar.

La queja se ha venido oyendo y repitiendo mucho durante estos últimos días, en los que se acumulan los muertos a causa de accidentes laborales. 'Hoy uno puede ser empresario de la construcción con un Patrol y un móvil', explica Doncel. Las listas de subcontratas, a veces, pueden ser muy largas y ello significa que 'se reduce el margen de beneficios'. ¿Quién lo paga? 'El último currante que trabaja en condiciones infrahumanas', se lamenta Doncel. Durante el verano también aumenta el número de accidentes. En el periodo estival, añade Doncel, la gente 'todavía se mueve con más prisas'.

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