Telefónica congela todos sus proyectos de UMTS en Europa

La aventura de la telefonía móvil de tercera generación (UMTS) cae como una losa sobre las cuentas de Telefónica. La compañía española con más accionistas anunció ayer unas pérdidas de 5.574,2 millones de euros (casi 1 billón de pesetas) en el primer semestre del año, frente a los 1.148,6 millones de euros de beneficios obtenidos en los primeros seis meses de 2001, después de que el consejo de Telefónica aprobara provisionar 4.837 millones de euros para cubrir su inversión en la compra de licencias UMTS. El grupo ha reducido la deuda en 2.895 millones en los últimos tres meses.

La entrada del grupo en pérdidas se produce menos de un mes después de que trascendieran los abultados números rojos de Telefónica en 2001 (7.182 millones de euros) de acuerdo con la restrictiva normativa contable aplicada en Estados Unidos, donde también cotiza la compañía. Y llega dos años después de que Telefónica se sumara, junto con los competidores europeos, a una carrera de inversiones multimillonarias por obtener licencias de telefonía de última generación con el fin de expandirse por Europa y ampliar tamaño mientras mantenía su liderazgo en España. En los principales mercados por los que apostó con una tecnología que se retrasa, Alemania e Italia (en los consorcios Quam e Ipse, respectivamente), Telefónica pagó por las licencias 6.000 millones de euros.

La empresa presidida por César Alierta subrayó ayer que las provisiones extraordinarias que ha decidido realizar son un apunte contable y que 'no suponen salida de caja alguna'. También insistió en que el valor de los activos de Telefónica Móviles se revisa para aumentar la generación de flujo de caja del grupo.

La filial más perjudicada es la de móviles. En los primeros seis meses de 2002, las pérdidas netas de Telefónica Móviles se elevaron a 4.333 millones de euros, en comparación con el beneficio de 379 millones obtenido en el mismo periodo del año pasado. En su comunicación de ayer, la filial de móviles insiste en que, sin las provisiones que ha decidido realizar por las nuevas valoraciones de sus planes de negocio en Alemania, Austria, Italia y Suiza, que ascienden a 4.902 millones de euros, la compañía habría aumentado su beneficio neto un 50,3%.

En la suspensión de actividades en Europa, destaca la de la operadora Quam, que está participada por Telefónica Móviles y por la operadora finlandesa Sonera. Por el momento, esta compañía lleva unos pocos meses funcionando como un mero operador móvil virtual en el mercado alemán, que apenas ha crecido un 1% en estos últimos meses.

A la carga de las licencias se añadieron en el primer semestre otros quebraderos de cabeza. Los ingresos consolidados del grupo sufrieron en este periodo una caída interanual, ya que se situaron en 14.635,5 millones de euros, un 4,4% menos que en los primeros seis meses del año pasado. Telefónica atribuye esta caída a la evolución de su filial de medios de comunicación, Admira y, sobre todo, a la aportación negativa de sus negocios en América Latina, donde la facturación de Telefónica se hundió un 23,3% y se situó, en total, en 3.974,1 millones de euros. El resultado operativo en Latinoamérica cayó un 25%. La crisis argentina y la depreciación de las monedas de la zona explican esta caída, y el grupo subraya que, sin este impacto, sus ingresos hubieran crecido un 4,1%. Por su parte, Admira vio caer los suyos un 30% respecto del primer semestre del año pasado. La división de medios multiplicó por dos sus pérdidas hasta los 305,6 millones.

El resultado operativo (Ebitda) consolidado del grupo descendió un 4,4% de enero a junio frente a los mismos meses de 2001, pero Telefónica remarca que mejora el resultado de explotación, ya que pasó de caer un 10,9% en el primer trimestre de 2002 a una caída inferior, del 8,1%.

Reducción de la deuda

La evolución de la deuda del grupo, pese a todo, es muy positiva. El segundo trimestre cerró con una deuda neta de 25.788,8 millones de euros, lo que representa una significativa reducción de 3.152,8 millones respecto de la registrada a finales del ejercicio de 2001 (y 5.455 milloens en los últimos doce meses) . En este avance no ha habido desinversiones de por medio, sino que se debe, según la compañía, al descenso en 2.030 millones del valor de la deuda no denominada en euros, ya que el dólar y las monedas latinoamericanas se han depreciado frente a la divisa europea.

El resultado de Telefónica en España bajó un 35,1 % mientras en Terra, los resultados mejoraron, ya que la filial de Internet recortó un 52,2% sus pérdidas en el segundo trimestre de este año, en que sus números rojos fueron de 103,3 millones de euros. Sin embargo, los ingresos descendieron un 10%. TPI (Páginas Amarillas) sorprendió con un aumento del beneficio en ese periodo del 69,3%.