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Reportaje:

Navajazo mortal al alba

Un hombre mata en Benidorm de dos puñaladas a su agresor, tras arrebatarle el arma

El escenario fue el paseo marítimo del destino turístico español por excelencia: Benidorm. Al alba de ayer, a escasos metros de la orilla de la archiconocida playa de Levante y a las puertas de los discobares de una zona de ocio, un hombre de 20 años asestó dos navajazos mortales a otro de 43. El segundo había herido previamente con la misma arma blanca al primero en el abdomen. Esta muerte pasa a engrosar la lista de homicidios por arma blanca en Alicante, que el año pasado fueron una docena y desde 1997 han crecido un 33%.

El supuesto autor del mortal apuñalamiento está ingresado en el hospital comarcal de la vecina localidad de La Vila Joiosa. La investigación no ha desvelado el móvil de la pelea a la espera de tomar declaración al homicida herido y a otras dos personas, G. C. S., de 41 años, de nacionalidad belga y amigo del fallecido, y O. P., de 26, de nacionalidad francesa, acompañante del agresor, ambos testigos directos de la pelea. El juez instructor, el titular del Juzgado número 6 de Benidorm, ha reforzado el hermetismo del caso y ha declarado secretas las diligencias.

En la provincia de Alicante se registraron el año pasado 12 muertes por arma blanca

El suceso acarreró el incremento de las críticas de los vecinos y del primer partido de la oposición, el PSOE, sobre la inseguridad de la zona debido a la concentración de discobares. La acusación fue rechazada por los propietarios de los locales y el Ayuntamiento de Benidorm.

El agresor y la víctima, ambos originarios de Francia, aunque el segundo con nacionalidad española y residente en Benidorm, llegaron hacia las seis de la mañana al lugar de los hechos procedentes de otra zona de ocio de la población, en concreto el Rincón de Loix. En la confluencia de la avenida de Alcoy -nombre del paseo marítmo que discurre en paralelo a la playa de Levante- con la calle de Bilbao, los dos hombres iniciaron un discusión. Uno de ellos, V. E. H., esgrimió una navaja y se la clavó a su oponente. Éste logró sacarse el arma blanca y, aunque herido, se lanzó sobre su agresor y le asestó dos navajazos que le causaron la muerte instantánea. Un testigo de la reyerta manifestó que la víctima sufrió al menos dos puñaladas en el cuerpo.

Los equipos médicos del SAMU desplazados al lugar del crimen no pudieron hacer nada por reanimar al hombre. Tras el apuñalamiento, el agresor huyó, aunque fue encontrado a los pocos minutos y a escasos metros, caído en el suelo, por los agentes de la policía.

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La trágica muerte disparó las críticas de los vecinos de ese tramo del paseo marítimo, que resaltaron los continuos altercados y peleas que se registran en la zona, 'aunque nunca se había llegado a estos extremos [una muerte por arma blanca]', precisó el conserje de un edificio, informa Efe.

Las denuncias de los los vecinos suscitaron, a su vez, la reacción de los propietarios de los locales de ocio. Éstos declinaron su responsabilidad alegando que los hechos ocurrieron en plena calle y una hora después del cierre de los bares. La asociación de discobares y locales de ocio de Benidorm convocó en la tarde de ayer una rueda de prensa para insisitir en que la 'reyerta fue un hecho aislado, en plena calle, y cuando los locales estaban ya cerrados'.

La postura de los propietarios de los discobares fue corroborada por Francisco Saval, concejal de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento, del PP. 'No hay ninguna denuncia en la policía de vecinos de esta zona por altercados o peleas', dijo. 'Ha sido un hecho aislado. Estamos hablando de una de las zonas de ocio más seguras de Benidorm, donde, además, los locales cumplen a rajatabla el horario de cierre, a las cinco de de la madrugada', añadió. La aseveración de Saval respecto a la ausencia de denuncias relativas a altercados en la zona de la reyerta, no pudo ser contrastada ni en la Policía Local ni en la Comisaría de la Policía Nacional. Ambas invitaron a este periódico a solicitar los datos hoy.

La mortal pelea de ayer fue aprovechada por los socialistas para arreciar en sus críticas a la política del Gobierno del PP. El secretario general del PSPV-PSOE de la comarca de La Marina Baixa (donde está Benidorm), Jaume Llinares, acusó al delegado del Gobierno en la Comunidad, Francisco Camps, de 'estar más preocupado por su promoción política personal que por buscar soluciones al incremento de la inseguridad ciudadana'. Camps ha sido designado candidato del PP a la presidencia de la Generalitat.

Las muertes anuales por agresiones con arma blanca en la provinca de Alicante han pasado de 9 en 1997 a 12 en 2001, cifra que supone un aumento del 33%, según datos facilitados por el Gobierno. Por otra parte, la policía se incautó de 4.000 pastillas de éxtasis en una discoteca de Benidorm. El propietario del local, R. R. G., fue detenido, informa David Cerdán.

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