_
_
_
_
Entrevista:RAMÓN RABANERA | Diputado General de Álava

'En el PP vasco debemos moderar las formas en el mensaje'

Ramón Rabanera (Vitoria, 1948) cumplirá el sábado tres años como principal representante institucional del Partido Popular en el País Vasco. Al frente de la Diputación de Álava, se ha convertido en el mayor freno al nacionalismo, aunque 'desde el diálogo y la negociación', se empeña en recalcar. En un ejercicio de autocrítica, entiende que el PP, 'teniendo razón en el fondo', ha fallado 'en la forma'de enfocar su discurso en Euskadi y cree que, corrigiéndolo, muchos ciudadanos 'perderán el miedo a votar' al partido. Álava es, a su entender, el ejemplo.

Pregunta. Por fin se ha cerrado el acuerdo para la Ley de Aportaciones, aunque más que una negociación, parece haber sido una imposición.

'El dictamen del Parlamento es el acto más grave ocurrido en la democracia'

Respuesta. No. Es cierto que nosotros pedíamos la bajada del coeficiente vertical y que el Gobierno vasco no lo ha estimado oportuno. Las otras diputaciones apenas han dicho nada, así que las negociaciones han sido prácticamente entre el Gobierno y la Diputación de Álava. Sentimos no haber conseguido lo que queríamos, pero hemos logrado unas inversiones en infraestructuras. De no haber estado la Diputación de Álava, no tendríamos ese plan.

P. Pero sólo ha cedido una de las dos partes, ustedes.

R. No, porque el plan de inversiones no estaba previsto anteriormente, y ahora habrá unas perras para las diputaciones que no había con la anterior Ley. Hemos defendido los intereses de los alaveses y hemos intentado también disminuir la crispación en este país, cortando enfrentamientos y demostrando con el acuerdo que no estamos en contra de las instituciones vascas, como se nos acusó. Espero que este acuerdo valga para la normalidad.

P. ¿No ha echado de menos un apoyo de los ayuntamientos?

R. No sólo de los ayuntamientos, al fin y al cabo éstos pertenecen a quien pertenecen. Si hubiera sido por el PNV y EA de Álava, no habríamos conseguido estas inversiones. Les parecía todo fenomenal. No han sido un modelo de cómo se defienden los intereses del territorio.

P. ¿Les pesará a los ayuntamientos a la larga el resultado de la negociación?

R. Para ellos no creo que sea bueno; de eso no hay ninguna duda.

P. El dictamen de autogobierno del Parlamento no va en la misma dirección de acuerdo de la Ley de Aportaciones y ha creado gran división entre los partidos.

R. Desgraciadamente. Unos vamos por aminorar la crispación y otros van por confrontar y llevar a la sociedad vasca a un callejón sin salida. No queremos que nos lleven a un vacío institucional y la sociedad quiere el encuentro entre los demócratas.

P. ¿Será la Diputación alavesa el torreón defensivo o de contraataque contra ese dictamen?

R. El dictamen va contra el Estado de Derecho, el Estatuto y la Constitución. No hay duda de que la Diputación de Álava va a defender todo lo contrario. ¿Torreón? No cabe duda de que Álava es ahora un punto de referencia, observado por muchos, tanto por el mundo nacionalista como por el no nacionalista.

P. ¿Qué escenario se puede crear en septiembre?

R. No quiero dar ideas, pero igual dicen que no mandan todo el Cupo porque se van a quedar con las competencias. Sólo puedo decir que la Diputación va a cumplir la legalidad. Cumpliremos el Cupo que se acordó, canalizado a través del Gobierno vasco. Si el Gobierno vasco no cumple esos compromisos con el Gobierno central, será un acto de prevaricación.

P. ¿Tiene la impresión de que el Gobierno quiere rebajar el tono, hacer ver que las cosas no serán para tanto?

R. Tal vez, pero ese acuerdo es el acto más grave que ha ocurrido en la historia de la democracia en el País Vasco, incluso en España. Es un error histórico que no sé adónde nos puede llevar. Quieren quitarle importancia porque tienen miedo de asustar a la sociedad vasca. Bajo el punto de vista social, político y económico puede tener unas graves consecuencias. Y si no lo van a llevar a cabo, ¿para qué producen esa zozobra?

P. En cualquier caso, usted es vasco y sabe que el Estatuto no ha terminado de desarrollarse.

R. Sí, posiblemente en algunas cosas puedan tener razón. Pero las competencias se tienen que acordar. Si hace 23 años cualquier nacionalista hubiese visto la situación en la que estamos ahora, no se lo podría creer de satisfacción.

P. Ha comentado en alguna ocasión que Álava decidirá su futuro. ¿Qué significa exactamente?

R. Que tenemos un Estatuto con el que la sociedad alavesa está a gusto. Pero si alguno rompe el acuerdo institucional, los alaveses tendrán que decir lo que pretenden. No los vizcaínos o los guipuzcoanos. Por eso digo que ese dictamen facilita una desvertebración territorial.

P. ¿Ha leído el proyecto de Estatuto para Álava de sus socios de UA?

R. No. Yo estoy por aunar esfuerzos. Esas cosas aparecen por toda esta política de división. Los alaveses están cómodos donde están. Pero si esos señores plantean la autodeterminación o la independencia sé que los alaveses decidirán seguir como estamos.

P. ¿Cree que seguirá teniendo el apoyo del PSE en un año que es ya electoral?

R. Creo que habrá presupuesto en 2003. Las negociaciones para los anteriores han sido duras, pero con toda lealtad. En Burgos esto sería imposible. Pero Álava es y tiene que ser el freno a los ímpetus de soberanía. Además, no creo que así les vaya mal electoralmente a los socialistas

P. ¿Quién se presentará por el PP a las elecciones?

R. Por el Ayuntamiento, Alfonso Alonso, que es el mayor activo humano del PP en Álava. Y a la Diputación, quien decida el comité electoral. A veces me puede apetecer dejar la política. Iré si me lo piden, pero si eligen a otro, estaré encantado.

P. ¿Pero va a pedir que le busquen sustituto?

R. No. Eso no.

P. Ese discurso institucional, negociador y centrado que hace usted, ¿no se verá perjudicado por el radicalismo del PP frente al Gobierno y el nacionalismo?

R. A veces nos hemos equivocado. El PP tiene razón en el fondo: la falta de libertad, el mirar a otro lado ante las actitudes violentas... Pero a veces nos equivocamos en la forma. Eso fue lo que en las autonómicas nos pudo perjudicar. El PP del País Vasco tiene que moderar un poco la forma. Es la manera de que muchos ciudadanos que están atónitos no tengan miedo de votarnos, que sepan que se van a encontrar con un partido centrado. Como ha pasado estos tres años en Álava.

P. Éste parece un mensaje para Jaime Mayor y Carlos Iturgaiz.

R. Yo no se lo digo a nadie. Incluyo a todos, también a mí mismo. Tenemos que convencer de que somos la alternativa y que esa alternativa es de comodidad y de seguridad, jurídica e institucional.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_