Los futbolistas denuncian deudas por 18 millones de euros
Los impagos se han duplicado respecto a la pasada temporada
La alarma suena desde hace algún tiempo en las economías de los clubes de fútbol y el penúltimo estampido ha llegado con las deudas denunciadas por sus jugadores. Los futbolistas de Primera y Segunda División han denunciado a su sindicato, la AFE, deudas que con ellos mantienen sus clubes por importe de unos 18 millones de euros, casi el 100% más que la pasada temporada. Los clubes que no salden estas deudas antes el 31 de julio serán descendidos una categoría según establece el convenio firmado entre la AFE y la Liga Profesional.
El pasado lunes finalizó el plazo otorgado a los futbolistas para denunciar las deudas de la pasada temporada que con ellos mantienen sus clubes. 'Son unas cifras que asustan', señalaron fuentes del sindicato de futbolistas. El año pasado, por estas fechas, las deudas denunciadas en Primera y Segunda División se elevaron a 1.596.151.668 pesetas, es decir, 9.593.064,73 euros. Todas estas cantidades fueron abonadas en plazo y ningún club se vio obligado a descender, pese a que hubo equipos como la UD Las Palmas y el Valladolid que debieron de hacer frente a deudas por valor de 1.546.829 euros y 910.589 euros, respectivamente.
En la Liga Profesional, por el contrario, se muestran optimistas de cara al 31 de julio a pesar de la cuantiosa suma a la que algunos clubes han de hacer frente. Sí existe más que preocupación con respecto a media docena de equipos, porque ellos solos deben casi la mitad de las denuncias. Entre estos clubes destacan el Oviedo, la UD Las Palmas, el Xerez y el Jaén.
Este último, ya descendido esta temporada a Segunda B por su clasificación deportiva, puede perder otra categoría más hasta llegar a Tercera si no paga a tiempo a a sus jugadores. Otro tanto puede suceder con el equipo canario si no salda sus deudas, en cuyo caso pasaría de la Primera División de la pasada temporada a la Segunda B en la que está a punto de iniciarse.
El Xerez, por su parte, tocó con los dedos el ascenso a Primera durante casi toda la temporada y ahora, con otros dirigentes, vive pendiente de la amenaza de ser descendido a Segunda B.
La próxima semana se reunirán en Madrid la comisión mixta formada por representantes de la AFE y de la Liga Profesional para fijar las deudas que hay que saldar una vez que los clubes hayan presentado las alegaciones que estimen oportunas. El 31 de julio, dicha comisión resolverá si las respectivas deudas han sido saldadas o no, en cuyo caso determinará el club o los clubes que han de descender de categoría.
Fuentes del sindicato de jugadores señalaron, además, el convencimiento de que no son denunciadas todas las deudas. Tienen constancia de que jugadores de varios clubes han aceptado pagarés, con vencimiento a varios meses, para saldar esos débitos, con lo que sus equipos evitan la denuncia.
Los jugadores, en este caso, tienen otra oportunidad para denunciar si esos pagarés no se pueden ejecutar en su tiempo.En el mes de noviembre existe otro plazo para denunciar deudas. En este caso no se puede llegar al descenso del equipo que no pague. El castigo estipulado entonces es la suspensión de los derechos federativos del club que haya incumplido, lo que incluye, entre otras consecuencias, la imposibilidad de fichar jugadores durante el segundo plazo para ello de la temporada, en el mes de enero.
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