Tarragona da por hecho el traslado del Casino de Lloret al cine Capitol

El alcalde de Tarragona, el convergente Joan Miquel Nadal, se apresuró ayer a adelantar las intenciones de Casinos de Cataluña de trasladar el Casino de Lloret a la ciudad, al antiguo cine Capitol, ubicado en pleno centro. Responsables de Inverama, que gestiona Casinos de Cataluña, negaban que pretendieran cerrar la instalación de Lloret, aunque, paradójicamente, no desmentían su interés por implantarse en Tarragona, lo que es incompatible con la actual legislación, que restringe el número de casinos en Cataluña a sólo tres: los de Peralada, Lloret y Barcelona.

Tan sólo unas horas antes de este anuncio, polémico y temido en la localidad gerundense, la dirección de Juegos y Espectáculos interpelaba al consistorio de Tarragona sobre la compatibilidad del edificio localizado por Casino de Lloret con la actividad del juego.

Nadal y Àngel Fernàndez, teniente de alcalde de Urbanisno, no dudaron ayer en mostrar su satisfacción ante el traslado del casino a la ciudad, una actividad para la que ya habían ofertado hace varios meses dos emplazamientos más: el Hotel Imperial Tarraco y el Bingo Les Palmeres. Además del impacto económico para la ciudad -en Lloret la sala de juegos recauda en impuestos unos 600.000 euros anuales-, el local generaría más de 100 puestos de trabajo directos, además de un incalculado beneficio indirecto en el sector de los servicios.

En cambio, el sector hostelero de Lloret ve con muy malos ojos el traslado y lo califica de operación 'especulativa'. Si se va el casino, Lloret, dicen, 'pierde tres negocios: un casino, un restaurante y un cabaret'. La alcaldesa de Lloret, Lucía Echegoyen (PSC), siempre se ha mostrado dispuesta a hacer todo lo posible para evitar que el casino se vaya del municipio.

El antiguo cine Capitol se destina actualmente a aparcamiento privado y está situado en el centro de la ciudad, en la Rambla Vella, a escasos metros del Hotel Imperial Tarraco. Fernández explicó que las intenciones de Casinos de Cataluña serían las de crear en la primera planta la sala de juegos a la que se accedería desde la calle, mientras que la planta superior se destinaría a café y restaurante. En total son más de 1.000 metros cuadrados. Según Fernández los trámites para la apertura del local podrían durar tan sólo unos meses.

Sergi Loughney, director de relaciones institucionales de Inverama, no cambió ayer el contenido del cauto discurso que la empresa viene ofreciendo desde que surgieron los primeros rumores de traslado del casino. 'No nos planteamos, ni a corto ni a largo plazo, el cierre del Casino de Lloret', aseguró al tiempo que reconocía el interés por abrir un nuevo establecimiento en Tarragona. 'Se puede abrir un nuevo casino sin necesidad de cerrar el de Lloret', añadió. Según el portavoz de Inverama, se están estudiando diversas áreas y la firma Casinos de Cataluña recibe frecuentes ofertas para instalarse en nuevas zonas lúdicas. 'Somos un referente de ocio y prestigio y siempre hay ciudades interesadas en albergar nuestras instalaciones', explicó Loughney.