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La oposición critica el cierre en verano de cinco alberges juveniles

Educación afirma que la demanda desciende, aunque la ocupación media alcanza el 58%

Más de 50.000 personas durmieron el año pasado en los ocho albergues juveniles que hay en toda la región y en los que se puede pernoctar por apenas 12 euros. El segundo mes en el que hay mayor porcentaje de ocupación es agosto, con un 77%. Pero entre el 15 de agosto y el 15 de septiembre nadie podrá beneficiarse de cinco de los ocho albergues públicos de la Comunidad porque éstos cierran por vacaciones. Fuentes de la Dirección General de Juventud argumenta que en esta época del año los albergues están cerrados porque la demanda desciende al 10%.

Sin embargo, la estadística de la propia Dirección General de Juventud, dependiente de la Consejería de Educación, revela que la ocupación media durante los principales meses de verano es del 58%. El año pasado, más de 6.000 personas durmieron en los albergues juveniles de la Comunidad entre agosto y septiembre. En agosto, las 700 plazas de que disponen los ocho albergues estuvieron al 77,81% de su capacidad, y en septiembre, al 39,34%.

Izquierda Unida no está conforme con la explicación de Juventud, y cree que los albergues cierran parte del verano porque falta personal. 'Los trabajadores tienen que cogerse vacaciones, y como la Consejería de Educación no hace contratos de sustitución, no tienen más remedio que cerrar los albergues', afirma Dolores Ruano, portavoz del grupo parlamentario de IU. 'No se entiende que en verano, cuando deberían dar más cancha al turismo, la mayoría de los albergues de la Comunidad estén cerrados', añade.

A bajo precio

En la región madrileña hay ocho albergues juveniles, en los que pueden dormir españoles y extranjeros por un precio muy bajo (unos 12 euros por noche y con pensión completa para menores de 25 años; algo más para mayores de esa edad), con la única condición de que tengan el carné de alberguista. Hay dos albergues en Madrid capital, dos en San Lorenzo de El Escorial, uno en Rascafría, otro en el puerto de Navacerrada y dos en Cercedilla.

Más de 50.000 personas durmieron en los albergues de la región madrileña durante todo el año pasado, y pernoctaron en ellos cerca de 150.000 noches. Los de la capital permanecen abiertos todo el año, y uno de El Escorial cierra sólo en septiembre. Los cinco restantes se van de vacaciones medio mes de agosto y otro medio de septiembre. El grupo parlamentario de Izquierda Unida denuncia que los albergues cierran precisamente cuando casi todo el mundo está de vacaciones y hay mucha demanda. Agosto, con más de un 77% de demanda, ocupa el segundo lugar en mayor porcentaje de ocupación después de julio, según datos de la Dirección General de Juventud correspondientes al año pasado. Cerca de 3.000 personas pernoctaron en los albergues regionales en agosto, cifra similar a la de septiembre.

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En estos dos meses, durante el tiempo que permanecieron abiertos (primera mitad de agosto y segunda de septiembre), los albergues de Cercedilla, el del puerto de Navacerrada, el de Rascafría y uno de El Escorial, acogieron a unos 2.000 visitantes. Sin embargo, Juventud insiste en que la demanda desciende en esta época. 'Si comprobáramos que hay más demanda, nos plantearíamos abrirlos', señalan fuentes de este departamento.

Estos medios argumentan que la mayoría de los albergues de fuera de la capital se llenan el resto del año de madrileños, pero no en agosto y septiembre, porque viajan 'a otros albergues' del territorio nacional. 'Los extranjeros, cuando vienen a Madrid, no quieren hospedarse en otros lugares de la región, como en la sierra, sino en la capital. Por eso, los que hay en Madrid ciudad están abiertos todo el año', dicen.

El albergue que más visitantes recibió durante el año pasado fue el de la Casa de Campo, situado en la capital; 15.979 personas usaron este alojamiento 34.068 noches. El segundo que más viajeros acogió fue Los Batanes, ubicado en Rascafría, con 9.979 personas. Este albergue es uno de los cinco que cierran entre agosto y septiembre.

El público principal de este tipo de alojamiento es gente jóven, ya que son muy baratos, pero también reservan plaza familias y asociaciones, así como grupos de institutos que vienen a Madrid de excursión. El año pasado durmieron en los albergues de la región 964 grupos compuestos por un mínimo de 10 personas.

Fuentes de Juventud destacan que las más de 50.000 personas que utilizaron los albergues en 2001 no sólo lo hicieron porque el precio es bajo, sino porque en ellos encuentran 'una filosofía de convivencia y de ocio constructivo'.

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