Los bomberos alicantinos exigen a la Generalitat un mapa de riesgos de las distintas zonas de actuación

El consorcio provincial para el servicio de prevención y extinción de incendios y salvamento de Alicante ha solicitado a la Generalitat que confeccione un mapa de riesgos para conocer los índices de peligrosidad de las distintas zonas de actuación. Este mapa supondría, según José Luis García, delegado de la junta de personal del consorcio de bomberos, un paso importante en la solución al problema de falta de personal operativo para atender satisfactoriamente cualquier situación de emergencia.

García resume con un ejemplo la situación 'bajo mínimos', que han denunciado en reiteradas ocasiones los bomberos: 'El parque de Benidorm, con 12 operarios de servicio'. Incidió en que las localidades costeras de la provincia de Alicante multiplican durante los meses de verano su población mientras que la plantilla de bomberos es la mismaa que el resto del año.

El consorcio provincial de bomberos, que depende de la Diputación de Alicante, está integrado por unos 500 bomberos repartidos en siete áreas operativas, que incluyen 12 parques. 'La media europea de un bombero cada 1.000 habitantes aquí se cumple a duras penas', señaló. Por todo ello reclaman a la Consejería de Administraciones Públicas que confeccione un mapa de riesgos que dé a conocer la peligrosidad que puede derivar de las distintas áreas (industrial, forestal o turística). Recordó cómo en el área de La Vega Baja, donde se encuentran los parques de Orihuela, Almoradí y Torrevieja, los bomberos de este último parque vivieron este invierno un caso límite. 'Torrevieja es una población en expansión con la incorporación de calles nuevas que ni siquiera figuran en los callejeros. En una de ellas se produjo un incendio y cuando llegaron los bomberos los vecinos los insultaron por su tardanza', explicó.

La ampliación de la plantilla de guardia es una las reivindicaciones de los parques de Cocentaina e Ibi donde raramente se superan los 10 operarios para atender una emergencia en las 34 poblaciones del área operativa de La Montaña. 'Es una zona conflictiva porque hay muchas industrias y áreas forestales que pueden requerir la presencia inmediata de bomberos'. En este área la plantilla de 69 bomberos tiene una media de edad de 41 años. La no renovación del personal incide en sus condiciones físicas y la necesidad de realizar horas extraordinarias del personal fuera de servicio. Reivindican además una mejora de las infraestructuras y la adquisición de material para atender los incendios, así como la revisión periódica de los vehículos. 'Alguna vez nos hemos quedado con el volante de un camión en las manos', dijo.