Reacción puntual

La mecánica de los mercados funcionó ayer de forma casi automática y produjo el esperado ajuste técnico, aunque su cuantía dejó mucho que desear. La adquisición de valores a precios de saldo apenas mejoró el volumen de contratación del día anterior, lo que indica que los inversores no las tienen todas consigo respecto de si se ha tocado fondo en esta crisis. La contratación en el Mercado Continuo fue de 2.481,45 millones de euros, con un tercio aportado por las operaciones institucionales.

El Ibex 35 subía ayer el 1,84% y el índice general de la Bolsa de Madrid el 1,48%, mientras que el resto de los mercados europeos tenía un comportamiento algo más positivo. París ganó el 2,65% y Londres el 1,96%, al tiempo que Francfort subía el 2,33% antes del cierre.

Los datos económicos conocidos ayer apenas tuvieron incidencia en los mercados, volcados como estaban los inversores en rehacer sus carteras o en arañar unos céntimos a cualquier valor al que se le considerase capaz de reaccionar positivamente hasta el final de la jornada.

La confianza de los consumidores estadounidenses descendió en el presente mes, al igual que la de los empresarios alemanes, una muestra más de la incertidumbre sobre la capacidad de recuperación económica en el corto plazo. Son precisamente esas dudas sobre la reactivación de la economía las que cuestionan la capacidad de las operadoras de telecomunicaciones para poner en marcha sus proyectos y hacerlos rentables, y las que animan a sospechar que la crisis argentina tiene suficiente capacidad de contagio, por injusto que pueda parecer.

Para hoy se espera que la Reserva Federal mantenga los tipos de interés en el 1,75% en Estados Unidos, sobre todo porque todavía no se ha logrado encadenar una serie homogénea de datos positivos que permitan entrever la salida de la crisis económica.