Un tercio de las nuevas altas a la Seguridad Social son de extranjeros

Una tercera parte de las altas a la Seguridad Social registradas durante el mes pasado correspondió a trabajadores extranjeros, según anunció ayer el secretario de Estado de la Seguridad Social, Gerardo Camps. En mayo, el número de trabajadores extranjeros procedentes de terceros países afiliados a la Seguridad Social ha alcanzado la cifra de 760.000, mientras que en la Comunidad Valenciana la cifra total es de 77.000 (más de 55.000 no comunitarios). Camps consideró necesaria la llegada de trabajadores inmigrantes para que la economía española siga creciendo y se mantenga viable en el futuro el sistema de protección social.

A su juicio, la Seguridad Social está 'en el mejor momento de su historia' al haberse registrado un récord de afiliación que ha sobrepasado los 16 millones de personas, y con el mayor número de empleados procedentes de terceros países. 'Tenemos que seguir manteniendo esas políticas porque es indispensable que vengan personas de terceros países, pero de forma regulada y sin dar ningún margen de actuación a esos grupos que pretenden que la inmigración ilegal sea la forma generalizada de poder tener un trabajo en la Unión Europea'.

Inmigrantes rumanos

Por otra parte, la necesidad de renovar la documentación de identidad en el país de origen para la obtención de un permiso de residencia dejará de ser un obstáculo para la legalización de los inmigrantes rumanos ya que, según afirmó ayer el comisionado del Consell para la inmigración, Antonio Lis, Rumanía va a permitir que los pasaportes se renueven en embajadas y consulados. Lis se reunió ayer con la presidenta de la Asociación Castellonense de Ciudadanos de Países del Este, Ángel Pacsintar, y dio por solucionado uno de los grandes problemas de los inmigrantes, que se ven obligados a volver a su país de origen para aportar la documentación necesaria para regularizar su situación en España. Lis explicó que uno de los problemas a los que se enfrentan los inmigrantes se centra en la vivienda, ya que muchos de ellos se ven obligados a alquilar camas en pisos, por lo que se va a impulsar un programa específico destinado a acabar con esa fórmula de explotación de la vivienda. Además, admitió la contratación de trabajadores ilegales porque para el empresario resulta más rentable, por lo que el Gobierno va a intervenir para frenar esa 'perversión'.

El Consell también anunció ayer un convenio entre el Centro Internacional Mujeres del Mediterráneo (CIM-MED) y el Instituto Valenciano de la Exportación (Ivex) que permitirá la formación profesional de 160 mujeres marroquíes, con el fin de facilitar su inserción laboral en su país de origen. El acuerdo incluye cursos de seis meses de clases teóricas y otros tantos de prácticas profesionales en empresas valencianas en los países del Magreb, que incluyen además un compromiso de contratación por parte del empresario.