El Bellas Artes adquiere un lienzo de Luis Fernández influenciado por el 'Guernica'

Corrida de toros, una pintura de Luis Fernández (Oviedo, 1900-París, 1973) realizada en 1940 durante su exilio en París, ha incorporado a las colecciones del Museo de Bellas Artes de Bilbao una buena muestra de la influencia del Guernica, de Picasso, en los artistas de su entorno. La obra de Fernández plasma con gran expresividad la figura de un toro corneando a un caballo, 'en una reinterpretación muy libre de los elementos simbólicos del Guernica', dijo Javier Viar, director de la pinacoteca. Corrida de toros, comprada por 150.000 euros en una galería madrileña, forma parte de la última serie de adquisiciones del museo.

El criterio de selección de las obras recién adquiridas ha seguido el mismo esquema que las presentadas en mayo: una gran pieza de arte español -en aquel caso fue un lienzo de Miquel Barceló- y obras de artistas vascos que complementen los fondos ya existentes. Los elegidos en esta ocasión han sido Amable Arias (Bembibre, 1927-San Sebastián, 1984), Alfonso Gortázar (Bilbao, 1955) y Mari Puri Herrero (Bilbao, 1942).

Tras estas compras, el museo ha gastado en menos de un año para adquirir 40 obras un total de 900.000 euros del fondo de seis millones creado el pasado año por el Gobierno vasco, la Diputación de Vizcaya y el Ayuntamiento de Bilbao con el fin de enriquecer las colecciones en el plazo de 10 años. 'A partir de ahora, las compras irán más lentas', anunció Viar.

El museo ya contaba con otra obra de Fernández, Cabeza de toro muerto (1939), adquirida en 1982. Viar destacó la importancia del momento 'histórico, ideológico y plástico' en el que Fernández pintó Corrida de toros: en el exilio, tras la victoria franquista, en una Europa convulsionada por la guerra y bajo la poderosa influencia del Guernica.

En total, el museo ha destinado al último conjunto de compras 248.072 euros. A las adquisiciones se han sumado la donación por parte de dos particulares de sendas obras de Anselmo Guinea (Bilbao, 1854-1906) y Pedro Anastasio Bocanegra (Granada, 1638-1689), que serán expuestas tras ser restauradas.

Gran formato

Las compras buscan, señaló Viar, una 'visión pormenorizada' de los autores vascos. Los trabajos elegidos de Amable Arias son los lienzos de gran formato De lo invisible I y II, ambos realizados en 1972, que sobre la superficie roja dejan ver diminutas formas insólitas.

Gortázar estará representado a partir de ahora por dos obras representativas de su trabajo en las dos últimas décadas. Una de ellas, realizada en 1991, refleja una tienda de campaña, elemento iconográfico recurrente en la pintura de este autor. La segunda, una pieza de este mismo año, descubre un paisaje de casetas en una playa plena de color y luz. Las dos pinturas de Mari Puri Herrero -El Arenal al fondo y Albia- son representativas de su creación reciente. En ambas se reconoce el paisaje urbano de Bilbao y el inconfundible estilo de las figuras fantasmales características de la autora.