Zapatero acusa a Aznar de asfixiar la convivencia con su política neoliberal

La dirección del PSOE confía en que tras la huelga general del 20-J comience el declive del Gobierno. 'Habrá para nosotros noches más alegres que la del 12 de marzo del 2000', auguró el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, en referencia a la amarga derrota de las últimas elecciones generales, en una reunión en el Senado con los grupos parlamentarios socialistas. Zapatero pidió a su partido que 'esté más cerca que nunca de los trabajadores' para defender el Estado 'social' y los valores de la Constitución.

La dirección socialista ha decidido que los parlamentarios nacionales asistan a sus obligaciones el día de la huelga general, casi como un día normal. Pero el pleno del Congreso lo dedicarán a la jornada de 'protesta social', según denominación de Zapatero, con la inclusión de la exigencia al Gobierno de que retire el decretazo en todas las iniciativas previstas. Una representación destacada de la ejecutiva federal del PSOE acudirá el jueves a la manifestación convocada por los sindicatos en Madrid como culminación del paro.

La política del Gobierno está clara para el PSOE: 'El más puro neoliberalismo rancio y antiguo', con unas reformas que forman un 'collar que asfixian el modelo de convivencia', dijo Zapatero ante los suyos. Los parlamentarios socialistas acogieron con gran agrado el discurso de su líder que no dudaron en calificar de 'más incisivo y más socialdemócrata que nunca', según expresión de varios parlamentarios.

Aunque es estribillo de la dirección del PSOE continúa siendo que ese partido 'no convoca la huelga pero comprende y justifica sus razones' la actividad en torno a la misma es altísima pero trascendiendo el discurso mucho más allá del decreto gubernamental sobre protección del desempleo. Zapatero no dudó en afirmar que Aznar quiere llevar adelante un plan de reformas que termine con el Estado de Bienestar e incluso con 'el modelo de convivencia'.

El portavor parlamentario socialista, Jesús Caldera, pidió por su parte al Gobierno que deje de 'coaccionar a todos los ciudadanos españoles y que permita el derecho de huelga. Por la noche el PP rechazó sendas mociones del PSOE y de IU sobre el decretazo en medio de una gran bronca por la intervención de la diputada socialista Isabel López Chamosa que levantó las iras de los bancos del PP.