Ciscar tilda de 'actos de demagogia' las protestas por el cierre de El Carme

La subsecretaria de Promoción Cultural, Consuelo Ciscar, insistió ayer en que el proyecto de acondicionamiento del Convento de El Carme de Valencia como Museo del Siglo XIX, que incluye la incorporación de las salas que hasta ahora han funcionado como Centre del Carme del IVAM, 'no hace peligrar de ninguna manera el arte contemporáneo' de la Comunidad. La responsable de Promoción Cultural de la Generalitat afirmó, en la presentación de la exposición Impresionismo ruso, que el proyecto del Museo del Siglo XIX es un trabajo 'muy elaborado y muy importante, ya que los valencianos no tenemos que renunciar, ni lo vamos a hacer, a disponer de un espacio dedicado a este siglo tan importante en nuestra historia artística'.

Ciscar tildó de 'actos de demagogia' la polémica suscitada por la remodelación del convento, que ha supuesto el cierre del Centre del Carme del IVAM y prevé el traslado al Museo de Bellas Artes San Pío V de las piezas arquitectónicas del patio del Embajador Vich conservadas en el monumento. La subsecretaria incidió en el hecho de que el Museo del XIX 'es un compromiso electoral del Partido Popular que presentamos hace siete años'. Ciscar dijo no entender las críticas a esta iniciativa. 'Un Gobierno tiene derecho a tener un programa electoral y los periodistas y los ciudadanos a leerlo', apuntó.

El claustro no es BIC

Asimismo, destacó la respuesta del público que ha recibido el Museo del XIX. 'La exposición sobre Sorolla la vieron 253.738 personas, lo que supera con creces la cifra de visitantes del Museo de Bellas Artes y del IVAM en todo el año; por algo será', sentenció. Respecto al traslado del patio del Embajador Vich, Ciscar aseguró que su departamento 'ha seguido la normativa en todos sus pasos' y añadió que el patio del Embajador Vich no está declarado Bien de Interés Cultural (BIC) ya que, precisamente, el retorno de estos elementos a su ubicación original permitirá catalogarlo como tal. '¿Cómo va a estar declarado BIC un patio que tuvieron que romper cuando lo trasladaron al Convento del Carmen?', se preguntó.

Precisamente en las salas del Museo del Siglo XIX se inauguró ayer la exposición sobre el impresionismo ruso que reúne un total de 69 obras firmadas por medio centenar de autores. La muestra, que se exhibirá hasta el 28 de agosto, ofrece a los visitantes 'la oportunidad única de contemplar un conjunto de piezas que durante años han permanecido, por razones políticas, guardadas en una cámara acorazada, detrás de un verdadero telón de acero', según señaló su comisaria, la especialista Marta Sierra.

La exhibición alberga una selección de los fondos del Museo Estatal Ruso de San Petesburgo -donde hay más de 500.000 obras- que descubren al espectador el desarrollo entre finales del siglo XIX y los primeros años del XX del impresionismo ruso, un movimiento 'tan interesante como desconocido', explicó la experta. Ignorada durante años, debido a la situación política de la URSS, primero, y Rusia, después, las obras maestras de esta corriente cuentan con obras de artistas de la talla de Kandinsky o Serov, considerado el iniciador del movimiento en ese país. Este año, la muestra se ha podido ver en Salamanca y Sevilla, después de su itinerancia por Europa.