Iberia se codea con la 'jet' de la Bolsa
La compañía prevé mayor demanda de acciones tras entrar en el selectivo Ibex-35
El Ibex, el índice de referencia de la Bolsa española que agrupa a las 35 empresas con mayor volumen de contratación media y, por lo tanto, las de mayor liquidez, acogerá a partir de julio a un nuevo miembro, Iberia, que ocupará la plaza que abandona Telepizza. Los buenos resultados de la compañía y las perspectivas de que el mercado del transporte aéreo mejoren en el transcurso del año la han llevado a codearse con lo más granado del mercado. Estar en la jet puede aumentar la demanda de acciones de Iberia, que forma parte del club 15 meses después de comenzar a cotizar. En ese periodo se ha revalorizado el 53,8%.
La compañía se sitúa en el puesto 24 del índice, con una contratación bursátil diaria de seis millones de euros
Visibilidad y más demanda de acciones. Eso es lo que aportará el Ibex-35 a Iberia, según opina Elena Baillo, subdirectora de relaciones con accionistas de la compañía. Estar en el Ibex no es sólo colocarse en el escaparate, sino en la cartera de muchos fondos de inversión, nacionales y extranjeros, referenciados al mismo, y en aquellos que invierten en los denominados blue chips, que no son otros que los valores que componen los índices de referencia de las distintas Bolsas. A través del Ibex, Iberia entra también en las carteras de los fondos referenciados a los índices de índices, es decir, a aquellos formados con las referencias de varios mercados internacionales. 'Todo esto puede incrementar la demanda de acciones de Iberia', dice Baillo, aunque es más que posible que el mercado haya descontado ya hace tiempo la entrada de la compañía en el selecto club, algo esperado desde hace meses, ya que cumplía los requisitos exigidos.
Sólo las empresas con un determinado porcentaje de free float, es decir, de acciones que se mueven en el mercado, y con un determinado volumen de contratación diaria pueden ser miembros del Ibex. Además, su capitalización media tiene que ser superior al 0,3% de la capitalización total del índice durante los seis meses de control en los que se mide la aptitud del candidato, y la contratación tiene que tener cierta calidad, o lo que es lo mismo, la acción tiene que ser movida por varios partícipes. El pasado enero, Iberia cumplía todas las condiciones, excepto el nivel de capitalización media, que era del 0,19% del Ibex.
Ahora la compañía entra en el puesto número 24 de las 35 empresas que componen el índice, después de haber acreditado un free float del 54,6%, una contratación diaria de seis millones de euros y una capitalización media del 0,6%. En los últimos seis meses ha movido una media diaria de negocio de 4,4 millones de títulos, lo que supone la cifra más alta de los 150 valores del mercado.
Con Iberia, el Ibex, que se pretende sea un reflejo de la marcha del mercado español y los sectores que lo componen, añade el del transporte aéreo. Su socio industrial British Airways forma parte del índice de referencia de la Bolsa de Londres, el FT-100, y Air France, del CAC-40, el de la Bolsa de Francia.
Ganarse la confianza
La compañía, que salió tarde y mal a cotizar, ha terminado por ganarse la confianza de los inversores. 'La OPV', dice Baillo, 'se hizo en un momento muy difícil del mercado. En plena operación de márketing, la fase más importante de la operación, los mercados caían, y las líneas aéreas más, e Iberia era considerada en el extranjero una empresa mediana. Todo eso desincentivó la compra, pero ahora que hemos tenido más contacto con los inversores han conocido nuestros puntos fuertes'. Y la acción no ha parado de subir. Iberia salió a cotizar el 3 de abril del año pasado a 1,19 euros, se colocó a 0,79 euros tres días después del 11 de septiembre y desde octubre-noviembre empezó a subir, sin prisa pero sin pausa. Éste año se ha revalorizado un 66,4%, y ha sido de los valores que más ha subido desde enero.
A juicio de la compañía, la entrada en el Ibex y el aumento de la cotización no hacen más que reflejar los buenos resultados que Iberia está obteniendo. En 2001, uno de los peores ejercicios para el sector, cerró con un beneficio de 50,2 millones de euros, y en los primeros cuatro meses de este año el beneficio de explotación ha sido de 27,7 millones de euros, 101 millones más que en igual periodo del año anterior. Aunque los ingresos totales de explotación han sido prácticamente los mismos que los de hace un año, los costes han disminuido un 6,7%.
El buen funcionamiento del plan anticrisis puesto en marcha a raíz de los sucesos del 11 de septiembre -Iberia redujo oferta, empleo y retrasó la recepción de nuevos aviones- está en la base de su éxito, a juicio de la mayoría de los analistas. Los viajes de los gestores de la compañía para explicar las medidas en los road shows no han caído en saco roto y han hecho de Iberia una compañía más conocida a nivel internacional. Alrededor de 40 analistas siguen ya la evolución de la acción y se ha producido un trasvase de títulos desde el sector minoritario a inversores institucionales extranjeros, a juzgar por los broker (intermediarios) que intervienen en la negociación.
De cara a los próximos meses, los analistas señalan como buenas bazas a jugar por la compañía la recuperación de la actividad, su fuerza en Latinoamérica y haberse convertido en una ficha importante en la futura consolidación del sector. Ahorro Corporación añade la ampliación del acuerdo comercial con British Airways, presentado a la Comisión Europea para su aprobación y que, a su juicio, podría añadir 60 millones de euros a los beneficios de cada operador cuando esté funcionando plenamente.
De momento, el presidente de la compañía, Xavier de Irala, ha cerrado el capítulo del 11-S y ha desempolvado el plan de expansión.
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