La tercera fase del Meliá de Alicante se reconvierte en hotel después de permanecer 30 años en desuso

La tercera fase del edificio Meliá de Alicante se ha reconvertido en hotel tras permanecer cerrado y en desuso durante 30 años, desde que se construyó sobre terrenos ganados al mar junto a la dársena de Levante del Puerto alicantino. Durante ese tiempo el inmueble ha pasado por nueve propietarios distintos, incluida la Autoridad Portuaria, organismo que tras varias subastas fallidas lo vendió en 2000 a la sociedad Plaza Puerta del Mar, SA, mercantil que lo rehabilitado para su explotación hotelera.

Tanto esta fase del inmueble como la que ocupa el hotel Meliá han permanecido durante años fuera de ordenación urbanística. Recientemente la Administración del PP lo legalizó.

El nuevo hotel (Spa Porta Maris), de tres estrellas superior y con 115 habitaciones, sólo ocupa una parte de la tercera fase del edificio. Sobre la otra (120 habitaciones) se proyecta la construcción de otro establecimiento hotelero, este de cinco estrellas. El presidente del Apartotel Meliá, el sacerdote Fernando Escudero, resaltó ayer que de esta forma el gran edificio dispondrá de tres hoteles: el Meliá, de cuatro estrellas; el Spa Porta Maris, de tres; y otro en proyecto de la máxima categoría.

El empresario y arquitecto Fernando de Andrés es el presidente de la sociedad que explota el hotel inaugurado ayer, que está dirigido por Domingo Luján, ex director comercial del Meliá Alicante. La inversión total del Porta Maris alcanza los 16 millones de euros, de los que 7 han sido aportados por entidades financieras. Unos 300 propietarios de apartamentos del Meliá participan en la sociedad Plaza Puerta del Mar, lo que, a juicio de esta mercantil, elimina la competencia con el anexo hotel Meliá.