El Ayuntamiento gaditano modifica el plan urbano para impulsar nuevos y mayores hoteles

El pleno del Ayuntamiento de Cádiz aprobó ayer, con los votos del PP, PSOE, PA y la abstención de Izquierda Unida, modificar puntualmente el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la capital para desarrollar un Plan de Dotación Hotelera, que contempla una serie de medidas e incentivos para que los empresarios del sector turístico se instalen en esta ciudad. El PP aprobó en solitario el convenio entre el Ayuntamiento y Renfe para remodelar la plaza de Sevilla, cuyo proyecto rechaza la oposición por las 'excesivas' zonas comerciales.

El Plan de Dotación Hotelera permitirá a los hosteleros construir más alto que los promotores de viviendas en determinadas zonas de la ciudad, al tiempo que podrán acogerse a las ventajas de este plan, entre las que se incluyen determinados incentivos fiscales.

Pese al apoyo dado en el pleno, el PSOE lamentó que durante los dos mandatos de Teófila Martínez no se haya construido 'ni una sola' plaza hotelera en Cádiz. 'La ciudad ha desaprovechado la explosión turística de la provincia, donde se han construido multitud de hoteles sin que la capital se haya beneficiado de esta corriente', dijo Juan Ortuño, portavoz del grupo socialista.

El PP no contó, sin embargo, con el apoyo de la oposición respecto al proyecto de remodelación de la plaza de Sevilla. PSOE, IU y el grupo andalucista criticaron la 'masificación' comercial y las 'carencias' de aparcamientos para rechazar esta propuesta. Especialmente crítico se mostró el portavoz de IU, Jesús Gargallo, quien vaticinó que estas actuaciones arrinconarán la actual factoría de los astilleros Izar en Cádiz y pondrán en riesgo su futuro en la ciudad. 'Generará una presión social que podría derivar en el cierre de la empresa', alertó Gargallo. Esta posibilidad fue rechazada tajantemente por el equipo de gobierno del PP.

'Inmovilismo'

Asimismo, el Partido Popular se valió de su holgada mayoría absoluta para rechazar un pronunciamiento del Consistorio en contra de la reforma del desempleo aprobada por el Gobierno y, en concreto, sobre la desaparición del subsidio agrario. El teniente alcalde de Hacienda, el popular José Blas Fernández, defendió la necesidad de la reforma como instrumento para 'reactivar una Andalucía que ha caído en el inmovilismo'. 'La reforma dejará de dar el pescado a los desempleados y les entregará una caña para pescar', apuntó de forma metafórica Fernández.

Por último, el pleno gaditano aprobó, con el rechazo de la oposición, un incremento del contrato de recogida de basuras de 1,27 millones de euros y rechazó una propuesta de Izquierda Unida para revocar la Medalla de Oro de la ciudad concedida en su momento al dictador Francisco Franco.