La relación de delitos e inmigración es un hecho, según Fernández

El delegado del Gobierno para la Inmigración, Enrique Fernández Miranda, comentó ayer que, aunque no le gusta hablar de ello, la relación entre delincuencia e inmigración 'es un hecho cierto contra el que luchamos todos', y se refirió a la situación de muchos de los inmigrantes vinculados a la 'marginalidad y la pobreza'. Además, comentó que no habrá un nuevo proceso de regularización para extranjeros sin papeles.

Invitado por el Foro de Opinión Manuel Broseta, Fernández Miranda señaló que la cifra de residentes extranjeros en la Comunidad Valenciana alcanza las 111.000 personas y apuntó que tras el final del proceso de regularización, el objetivo que se ha planteado el Gobierno es el 'la normalización de la inmigración' a través de la 'racionalización' del fenómeno y el deseo de potenciar la inmigración legal.

El contrapunto a esta situación es la lucha contra los extranjeros irregulares y, en este sentido, destacó que frente a los 44.000 que se rechazaron hacia sus países de origen en 2001, a lo largo de este año, ya son 20.200, lo que destaca 'el aumento del número de expulsiones'.

El delegado del Gobierno destacó tambien entre los objetivos de su gestión la integración de los extranjeros, lo que, dijo que se ha logrado en buena medida como indican los 710.000 inmigrantes afiliados a la Seguridad Social, o los 100.000 inscritos en el Instituto Nacional de Empleo.

Fernández Miranda comentó en su intervención que no habrá un nuevo proceso de regularización y dejó la puerta abierta a la reforma de la ley. Señaló que el texto legal actual, fruto de una temprana reforma de la ley anterior, 'es un instrumento espléndido que permite ordenar el fenómeno migratorio' aunque comentó que la adaptación a las directivas europeas puede forzar modificaciones.