Detenidos dos jóvenes en Vizcaya tras incendiar una oficina de Correos
La Ertzaintza detuvo a mediodía de ayer en Sopelana (Vizcaya) a dos jóvenes acusados de haber provocado dos horas antes un incendio que destrozó la oficina de Correos de la cercana localidad de Berango, tras desalojar a los funcionarios y clientes que estaban en su interior. La policía vasca destacó que la colaboración ciudadana hizo posible la rápida detención de los autores del ataque.
Los dos agresores entraron encapuchados en la oficina de Correos , situada en la avenida de Sabino Arana de Berango, poco después de las 10 de la mañana. Ordenaron desalojar el local y, en cuanto salieron los trabajadores y clientes, rociaron el interior con líquido inflamable y le prendieron fuego. En su huida, fueron observados por varios ciudadanos que revelaron después cómo cruzaban la estación de metro y se dirigían al barrio de Kurtzes, donde tenían aparcada una motocicleta que utilizaron para darse a la fuga.
La policía autonómica desplegó inmediatamente varias de sus dotaciones por las principales vías de salida de Berango, así como por los barrios que hubieran podido utilizar los dos proetarras en su huida. Ambos fueron localizados dos horas después en el barrio de Landaluze, de Sopelana, cuando circulaban en la misma motocicleta de su huida.
Los autores del ataque han sido identificados como O. G. S., de 19 años y vecino de Berango, y M. E. M., también de 19 años y nacido en Getxo, según la nota facilitada ayer por Ertzaintza. Ambos, junto con otros cinco jóvenes, fueron detenidos en julio pasado por un presunto delito de homicidio después de que, durante una discusión, agredieran en Sopelana a David Vázquez, de 23 años, quien cayó hacia atrás y se golpeó en la nuca contra el suelo, según fuentes de la investigación que cita Europa Press. El joven falleció poco después en el hospital. Los ahora detenidos quedaron en libertad tras comparecer ante el juez.
Ayer, los dos radicales abandonaron en la oficina de Correos incendiada el bidón que habían usado para llevar la gasolina y que permite a la Ertzaintza tener una prueba de su autoría. Los ertzainas encontraron diversas prendas de las que los saboteadores se habían ido desprendiendo durante su carrera en busca del ciclomotor en el que huyeron.
Los dos jóvenes permanecían anoche en dependencias policiales a la espera de pasar a disposición de la Audiencia Nacional.
Otro sabotaje se produjo en la madrugada de ayer en la localidad guipuzcoana de Astigarraga. Varios desconocidos prendieron fuego en un concesionario de Renault después de rociar con gasolina un vehículo. El coche quedó destrozado y las llamas se extendieron a otros tres turismos más. Tres Renault Megane y un Volkswagen Golf quedaron seriamente dañados por el fuego.
