Vecinos de El Cabanyal ceden sus recuerdos para un museo del barrio
Una antigua casa de estilo modernista, a punto de ser rehabilitada, es la sede de un nuevo museo en Valencia. No se trata de ninguna iniciativa institucional ni busca un gran impacto mediático. Es un museo hecho por los vecinos de un barrio sobre el que se cierne la amenaza de ser atravesado por una gran avenida. Planos de principios de siglo, cerámica, fotografías, muebles, objetos pesonales diversos, incluso una barca, proporcionan una visión antropológica del antiguo poblado en esta quinta edición del proyecto artístico Portes Obertes, organizado por la plataforma cívica Salvem El Cabanyal.
De modo que la primera planta del edificio recorre la idiosincrasia del distrito marítimo a partir de un material objetual y gráfico que remite a la historia de El Cabanyal: el mar, la arquitectura, la manufactura de tabaco, la escuela, los azulejos, el fútbol -aquí nació el Levante FC- o la riada.
En la segunda planta se ha organizado una selección de las intervenciones artísticas desarrolladas en las cuatro ediciones anteriores de Portes Obertes, en la que han participado centenares de artistas, mostrando su apoyo a la plataforma ciudadana que ha conseguido de momento la paralización cautelar del proyecto municipal por parte del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
En este sentido, esta edición de Portes Obertes contó ayer con dos invitados relevantes por cuanto ambos participaron hace 20 años en el movimiento vecinal de oposición a la participación y destrucción de gran parte del barrio de Otessen de Hamburgo, Peter Schwanewilms y Burkhart Springstubbe, arquitecto encargado del Archivo Taller de Historia de Ottensen, que recibe fondos públicos. Ambos explicaron que, al final, el gobierno del Ayuntamiento de la ciudad alemana, en este caso socialdemócrata, rectificó y ahora el barrio, tras su rehabilitación, se ha convertido en una zona residencial de 'artistas y también de lujo'. Springstubbe animó a los vecinos a no 'perder la paciencia'.
La tercera y última planta recoge las obras de artistas residentes en el barrio, como Vega Bermejo, Fernando Evangelio o Maite Miralles. El mexicano Jorge Sobrino también se ha unido a la iniciativa, así como otros artistas de diversos países.
En el Museu de El Cabanyal (calle de la Reina, 145), inaugurado ayer y coordinado por Emilio Martínez, también se repasa todas las actividades realizadas por Salvem el Cabanyal en defensa del barrio y a favor de un proyecto alternativo de rehabilitación. El Museo se abre los fines de semana a los visitantes, previsiblemente hasta el verano.
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