El PSE emplaza a Ibarretxe a reunir a los partidos y cumplir sus compromisos con los ediles amenazados

Representantes de las ejecutivas del PNV y el PSE intentaban ayer reconducir sus diferencias sobre el documento de apoyo a los ediles amenazados que debe remitirse a todos los ayuntamientos vascos para su aprobación. Los socialistas han urgido ya dos veces al lehendakari para que se cierre el acuerdo, bajo la advertencia de que, en caso contrario, el conjunto del proceso de acuerdos unitarios abierto por el propio Ibarretxe el 22 de febrero, habrá fracasado. Ayer, su portavoz, Rodolfo Ares, se declaró 'harto de condolencias' y exigió 'compromisos políticos'.

Ares emplazó a Ibarretxe a que asuma 'el liderazgo y la iniciativa política' para garantizar el desarrollo de los compromisos contraídos en aquella fecha, primera en la que el lehendakari logró reunir a todos los partidos vascos democráticos. Los socialistas hicieron este llamamiento junto a la exigencia de que se reúna de inmediato la comisión ejecutiva de la Asociación de Municipios Vascos-Eudel, controlada por los nacionalistas, para desbloquear los desacuerdos sobre su declaración en favor de los concejales amenazados y de la pluralidad municipal y contra quienes les acosan que debe llevarse a todas las corporaciones. Poco después del emplazamiento público del PSE a Ibarretxe, Eudel convocó para esta mañana la reunión de su ejecutiva y envió a los partidos un nuevo documento, sobre el que ayer trabajaron hasta última hora de la tarde representantes de las direcciones socialista y peneuvista intentando aproximar posturas.

El nuevo texto, según fuentes de los partidos del Gobierno vasco y de los socialistas, 'incorpora' planteamientos de éstos últimos. Figura una condena expresa a ETA -el primer borrador sólo mencionaba a la banda terrorista para pedirle 'respeto' a la sociedad vasca- y 'se da a entender', según fuentes del tripartito, que no se gobernará con Batasuna si no secunda la declaración. Desde el PSE se considera este nuevo texto una base aceptable, aunque 'mejorable', con algunas 'correcciones y añadidos'. En concreto, estiman que lo relativo al tratamiento que se dará a Batasuna si no secunda la declaración (el compromiso de no gobernar ni hacer oposición en los municipios con sus votos) 'se puede decir más claro', pero al menos está 'sobreentendido'.

Moción única

En estos contactos quedó también atado que la declaración será única e igual para todos los ayuntamientos. El PSE había anunciado que no aceptaría la fórmula de distintas mociones negociadas 'municipio a municipio' por la que se decantaron el portavoz del PNV, Joseba Egibar, y hasta el propio lehendakari el pasado domingo. Los partidos mantienen aún diferencias que esperan terminar de limar hoy, incluida la de si el texto será finalmente una moción o una declaración institucional de los consistorios, pero sólo la expectativa de un acuerdo da sentido a la convocatoria de la ejecutiva de Eudel.

El PSE insistió ayer en exigir a Ibarretxe que convoque a los partidos si la reunión termina hoy sin acuerdo y recordó que los dos compromisos del 22 de febrero, la creación de una comisión de seguridad y la moción municipal con las plataformas locales de apoyo, constituyen un todo. De hecho, los socialistas darían por finiquitado el primero, del que ya se apeó el PP, y donde ellos mismos mantienen aún diferencias en relación con la reforma del Código Penal y la inelegibilidad de los condenados por terrorismo, si no hay acuerdo en el segundo. [PNV, EA y Batasuna aprobaron ayer en el Ayuntamiento de Derio (Vizcaya) una moción del alcalde peneuvista que pide la anulación de las 'actuaciones judiciales y políticas conducentes a la ilegalización' de Batasuna].