El Gobierno electrónico se privatiza
Todos los gobiernos tienen webs, pero pocas son útiles; además, la mayoría de los ciudadanos no tienen acceso a la red
LARRY ELLISON Y BILL GATES, los dos hombres más conocidos y poderosos de las tecnologías de la información, están descubriendo las virtudes del Estado. Cuando el presupuesto informático de las empresas sigue sin repuntar de manera significativa, el gobierno federal se vuelve un cliente privilegiado. De manera inmediata, la informática puede ayudar a resolver muchos de los problemas de seguridad planteados después del 11 de septiembre. A más largo plazo, puede reducir los gastos de funcionamiento del Estado como en el sector privado.
Desde el 11 de septiembre, Ellison aboga por una tarjeta de identidad nacional para el mantenimiento de la cual ofrece los servicios de su empresa. El 17 de abril, Gates convocó en su casa a representantes de 75 países para hablar del gobierno electrónico (www.microsoft.com/billgates/speeches/2002/04-17glc.asp).
Oracle y Microsoft se han volcado en el mercado de la administración pública y ofrecen sus propios sistemas para autenticar ciudadanos a través de Internet
Tomando el caso de la autenticación de los ciudadanos en sus transacciones en línea, afirmó: 'Creo que en la mayoría de los países será difícil que el Gobierno sólo llegue a la masa crítica', sin la cual es imposible establecer un sistema que funcione.
Ni EE UU se salva. Mark Forman, responsable de tecnologías de la información para la Casa Blanca, reveló en la reunión que el Gobierno está considerando adoptar Passport de Microsoft para identificar a los internautas en todos sus sitios.
El mercado mundial de la e-administración está en efervescencia. Según una investigación entre 23 países, de la consultora Accenture, destacan tres grandes tendencias: un esfuerzo para 'tratar a los ciudadanos y empresas como consumidores al ofrecerles servicios que les facilitan la vida'; una mayor cooperación entre departamentos gubernamentales; y una creciente distancia entre los países más avanzados y el resto (www.accenture.com/xd/xd.asp?it=enWeb&xd=industriesgovernmentgove_welcome.xml). Según Accenture, Canadá es el gobierno más avanzado en el uso de la red, seguido de Singapur; España ocupa el puesto 15º.
El estudio de World Market Research Center (www.worldmarketsanalysis.com/e_gov_report.html) sobre 2.288 sitios gubernamentales en 196 países parece indicar que Accenture peca de optimista: apenas el 8% de los sitios ofrecen la posibilidad de realizar una operación totalmente en línea.El acceso a la información (71% de los casos estudiados) sigue siendo el primer servicio.
Según Pew Internet & American life, (www.pewinternet.org/reports/toc.asp?Report=57) una organización independiente sin ánimo de lucro, en dos años EE UU ha pasado de 40 a 68 millones las personas que han empleado la web y el correo electrónico para obtener información; 23 millones han hecho comentarios sobre asuntos de la vida pública y 13 millones han participado a favor de alguna campaña organizada por los ciberactivistas, esencialmente en los campos de medio ambiente, educación y salud; pero los sitios más buscados son los que dan información sobre diversión y turismo.
El gobierno electrónico tiene potencialidades enormes para el sector privado; pero, para los ciudadanos, sería un error repetir las ilusiones de las puntocom. El analista de Gartner John Mahoney cree que la mayoría de los portales de gobierno de hoy serán irrelevantes a medio y largo plazo. Vaticina que el gobierno electrónico empezará a tener sentido en el 2010.
Para transformar a fondo la vida cívica, el gobierno electrónico tiene que resolver tres problemas considerables: la oposición a privatizar ciertas actividades del Estado; el temor a la interactividad sobre la democratización del gobierno; y la dificultad de considerar que el gobierno electrónico tenga sentido donde la gente no tiene acceso ni a la red ni al e-mail. Todavía son mayoría.
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