Gracias, Pilar
Pilar Rahola se explaya con una divertida diatriba contra los tópicos de la progresía, que ahora se ha vuelto antisemita. Y me alegro que tú, Pilar, que para muchos observadores superficiales significabas el paradigma de la progre, te hayas desmarcado de ese catecismo que, en tu artículo, representan Vázquez Montalbán y Rosa Regàs. De manera que tu izquierdismo, tu feminismo y tu nacionalismo no responden al seguimiento de consignas dogmáticas, sino a una profunda reflexión sobre la realidad.
Nunca te agradeceré lo bastante que me hayas sacado de este sueño dogmático que me impedía ver que la destrucción sistemática de rebaños, cosechas, edificios, archivos, depósitos de agua, líneas eléctricas, aeropuertos y algunas vidas de fanáticos asesinos es un derecho de los legítimos propietarios de la tierra palestina y el mejor camino hacia la paz.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.