La física de las atracciones

Implicación, motivación, participación, innovación son conceptos que en los últimos años aparecen estrechamente ligados a las nuevas prácticas educativas. Pero conseguir que estos conceptos se plasmen en la realidad es una tarea bastante ardua para los profesores. Motivar a una clase de 25 chavales de 12 o 13 años no es nada fácil, por mucho que se presenten actividades innovadoras encaminadas a ello. El choque entre la enseñanza tradicional -la del libro, la tiza y la pizarra- y la realidad cotidiana que viven los escolares -Internet, Play-Station II- es, por el momento, un escollo difícil de superar para los docentes.

Por tal motivo, los profesores agradecen cualquier iniciativa que les ayude a avanzar en este sentido. Y una de las más efectivas, los datos de participación así lo avalan, es el programa lúdico-educativo que hace ya cuatro años puso en marcha el parque temático de Isla Mágica, en Sevilla.

La idea es bastante sencilla: un centro educativo concierta una visita al parque. A los profesores se les facilita con antelación, según el nivel, una guía educativa que vincula aspectos de varias disciplinas con los espectáculos o atracciones del parque. La Historia, por ejemplo, se aborda desde la perspectiva del descubrimiento de América. Los viajes de Colón; la frenética actividad de la Casa de la Contratación en el siglo XVI; la cultura de las civilizaciones precolombinas (Olmecas, Mayas o Aztecas) son sólo algunos de los aspectos históricos que abordan los escolares durante su visita a Isla Mágica.

Además, las guías incluyen una serie de actividades a realizar por los alumnos, como la Línea del Tiempo, práctica que permite a los chavales conocer qué ocurría en el continente americano al tiempo que, por ejemplo, en Europa, Carlos V construía su imperio. 'No es lo mismo tratar de explicarles en clase la de productos que se trajeron de América tras el descubrimiento que hacerlo ante una reproducción exacta de la Pinta, la Niña o la Santa María y en un escenario que reproduce fielmente lo que era un muelle del Puerto de Indias', explica José Antonio López, profesor de un colegio de primaria de Murcia.

Pese a estos atractivos, a José Antonio López, como al resto de profesores que el pasado jueves visitaron Isla Mágica, les era bastante complicado mantener la atención de sus alumnos. El Jaguar, una espectacular montaña rusa suspendida que da giros de 360º; Iguazú, descenso en balsa por una cascada a más de 60 km/h o El Desafío, una torre que permite experimentar una caída libre desde 68 metros de altura, resultan mucho más llamativos para los chavales. 'Esto está mil veces mejor que lo de los piratas y las carabelas. Has visto como me he puesto de agua', explica azorada a sus amigas Rosa, alumna de un colegio de Marbella, que acaba de 'chorrearse' por la cascada Iguazú.

Pero este frente también está cubierto en los materiales educativos. 'El riesgo y la velocidad atraen a los jóvenes, así que aprovechamos que ya están motivados por sí solos para explicarles leyes básicas de la física como el rozamiento, la gravedad o la energía potencial', explica José Antonio López en referencia a los contenidos 'de ciencias' que incluyen las guías educativas.

'Este programa es todo un éxito. Este año nuestras previsones son que nos visiten unos 125.000 escolares', señala Antonio Peláez, director general de Isla Mágica. 'Todo el programa está basado en la idea norteamericana de educar divirtiendo, el Edutaiment, que le llaman ellos. Y si encima les garantizas que los niños van a ir a un sitio que cuenta con todas las garantías de seguridad y calidad -Isla Mágica posee el certificado Aenor de calidad-, pues vienen encantados'.

El Planetario; el extenso jardín botánico; el Teatro Encantado: el Aviario de especies exóticas o el Balcón de Andalucía, que reproduce los principales monumentos de cada provincia, son algunas de las atracciones que se ofrecen a los visitantes y que se incluyen dentro de los '18 filones lúdico-educativos' en los que se ha dividido el parque. '¿El mejor? El Jaguar', afirma tajante Rosa.