'En los momentos difíciles he ganado casi siempre'

A Javier Clemente los retos ya no le asustan ni le incomodan. Visita el estadio Bernabéu como colista con su nuevo equipo, el Tenerife, de la Primera División. Nada que ver, pues, con aquellos años épicos en la isla canaria, cuando el Madrid entregó al Barcelona dos títulos de la Liga en la última jornada y de forma inesperada. Acostumbrado a ganar, se ha curtido en no perder en sus estancias en el Betis, el Olympique de Marsella, la Real Sociedad y ahora el Tenerife. Cada vez, una vuelta de tuerca más a la dificultad. Pero no se arruga. No existe el miedo escénico. La clasificación es la que manda en el cálculo de las posibilidades y no le preocupan las acusaciones de maletines o de pactos que puedan alterar el curso final del torneo.

'La única apuesta en el Bernabéu es que el Madrid no pueda hacer su juego. Yo no creo en el 'miedo escénico'

'¿Pactos? ¿'Maletines'? Esto es una feria y yo ya he estado en demasiados sitios para extrañarme de algo'

Pregunta. Los partidos entre el Tenerife y el Madrid han sido casi siempre distinguidos. ¿El de hoy pasará también a la historia?

Respuesta. Hay una diferencia fundamental. Los dos que todo el mundo recuerda se jugaron en la isla y ahora jugamos en el estadio Bernabéu. Además, en aquellas ocasiones el Tenerife o no se jugaba nada o estaba peleando por la Copa de la UEFA. Sin embargo, ahora estamos en el último lugar de la clasificación. El Madrid está, como entonces, disputando el título de la Liga. Hay que ser realistas, el Madrid creo que no ha perdido ningún partido en su casa y eso hace más difícil nuestra tarea. Pero nosotros estamos en una situación comprometida y no podemos relajar la actitud. Además, hay que saber qué equipo tenía en aquellos partidos el Tenerife -Emerson, Makaay y compañía- y el que tiene ahora. Las situaciones difícilmente son comparables.

P. Frente al Madrid, en su terreno, siempre se plantea un debate sobre cómo ganarle: resguardándose de su potencial ofensivo o buscando sus flancos defensivos. ¿Cuál es su apuesta en un partido de estas característica?

R. La única apuesta en el Bernabéu es que el Madrid no pueda realizar su juego. No hay que darle más vueltas Yo no creo en el miedo escénico. Tengo comprobado que de cien partidos jugaríamos 80 al ciento por ciento. El Bernabéu motiva. Otra cosa es el resultado que obtengas, que está mediatizado por otras razones. Lo que está claro es que tienes que jugar con motivación, pero también con paciencia. La motivación está asegurada, pero hay que materializarla en el desarrollo del juego a sabiendas de las dificultades.

P. La derrota del Madrid en Pamplona le habrá animado para conseguir un objetivo en principio imposible.

R. La verdad es que esa derrota no me la esperaba. A nosotros nos venía francamente mal, vista nuestra situación. Así que tampoco la deseaba. Pero es que la Liga está muy igualada y estas cosas pueden ocurrir.

P. ¿Ve al Madrid como el principal candidato a conseguir el título de la Liga?

R. Ahora mismo es el segundo candidato porque va el segundo en la clasificación. En estos momentos lo que manda es la clasificación y lo que dice es que el Madrid es el segundo, a un punto del Valencia. Por lo tanto, lo tiene un poco más dificil que el Valencia. Del mismo modo, nosotros somos los que peor lo tenemos porque vamos los últimos. Pero, en cualquier caso, opino que los tres que van primeros son igual de sólidos. Cualquiera puede ganar la Liga.

P. ¿Ha echado cuentas de los puntos que necesita el Tenerife para salvarse?

R. No. No es mi estilo. Yo voy domingo a domingo. Lo que sí sé es que hemos mejorado. Cuando yo llegué, estábamos solos en la última posición y ahora seguimos en ella, pero acompañados. Algo hemos mejorado.

P. A falta de un mes de competición, ¿qué le preocupa más: su equipo, los árbitros, los pactos o los maletines?

R. Esto es una feria y yo ya he estado en demasiados sitios para extrañarme de algo. He estado en Cataluña, en Madrid, en el País Vasco, en Andalucía, en Francia... ¡Como para que algo me soprenda! He visto de todo. Así que lo único que me preocupa es el rendimiento de mi equipo. Lo demás no sirve para nada.

P. Pero, recientemente, ha arremetido contra el Rayo por su campaña respecto al arbitraje.

R. Lo único que he dicho es que habría agradecido que el otro día, frente al Valladolid, hubieran reconocido que el árbitro se equivocó a su favor con el gol no concedido. Hay una razón evidente: cuando alguien se queja de esas situaciones, siempre hay un tercero perjudicado. Lo más honrado habría sido decir: 'Señores, esta vez el árbitro, con su error, nos ha favorecido'. No se ha hecho y eso no es justo. Todo eso hay que erradicarlo. Hay demasiados follones y un día va a pasar algo grave. Y lo que tengo claro es que yo he sido el más propenso a estar callado. Eso, a pesar de que conozco muchas cosas de las que no voy a hablar.

P. Usted siempre ha sido un ganador, pero ahora anda metido a salvavidas de equipos en apuros. Si desciende el Tenerife, ¿se acabará su magia?

R. Hasta la fecha, no ha descendido ninguno de los equipos a los que he entrenado. ¿Mi magia? Podría ponerse en cuestión si dispusiera de un año de trabajo. De lo contrario, alguna vez voy a entrenar a un equipo que esté ocho puntos por debajo del descenso, queden tres partidos y me exijan que le salve. Cada cosa tiene su medida. Pero no tengo ninguna duda de que habrá algún alumbrado que, si el Tenerife desciende, diga que ha bajado el equipo de Clemente. Esto es así y no se puede hacer nada.

P. De todas formas, la primera vez que se habló de pactos para evitar el descenso fue a raíz de las declaraciones del presidente de Las Palmas regalando los puntos al Tenerife en el supuesto de que no le hicieran falta para su propia salvación.

R. Yo no pienso en ese partido. A mí me preocupa el encuentro frente al Madrid y después el del Valladolid. Ojalá llegáramos al derby canario con la salvación garantizada para ambos equipos y pudiéramos celebrar la fiesta del fútbol canario. Sin embargo, creo que eso, matemáticamente, es casi imposible. No me preocupan esas cosas por lo que antes decía, porque ya he visto de todo.

P. Madrid no parece el lugar más apropiado para comenzar a resurgir.

R. La verdad es que en los momentos difíciles y complejos he ganado casi siempre. Lo único que me preocupa somos nosotros mismos. Yo estoy contento con el equipo. Estamos en un buen nivel y lo venimos demostrando en los últimos partidos. Pero hay que reconocer que la situación es complicada. Somos los que peor lo tenemos.