Bodas de acero

La desintegración paulatina de las estructuras franquistas, a partir de 1975, fue el pistoletazo de salida para la reordenación organizativa de trabajadores y empresarios. Organizaciones que en los casos más representativos siguen en el candelero un cuarto de siglo más tarde. Como la Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval), que hoy conmemora los 25 años como organización sectorial.

Esta tarde, los actuales responsables de la patronal valenciana del metal reconocerán, en el transcurso de la celebración, el trabajo de sus predecesores en el cargo con una medalla dirigida a los que fueron presidentes y secretarios generales de la federación. Un nuevo capítulo de una trayectoria que se inicia entre mayo y junio de 1977, cuando diversas 'agrupaciones de empresarios del Sindicato Vertical', convertidas en asociaciones, depositaron sus Estatutos en las oficinas que el Ministerio de Relaciones Sindicales abrió para la ocasión, según recuerda Pere J. Beneyto en El Asociacionismo Empresarial como Factor de Modernización. El caso valenciano (1977-1997).

Femeval ha contado desde su constitutición con siete presidentes. Antonio Almerich, actual responsable de la patronal, es el heredero de un cargo que ocupó desde su constitución, en julio de 1977 hasta febrero de 1979, Rafael García Brun, y que también ostentaron José M. Simó Nogués (hasta junio de 1983), Salvador Fernández Calabuig (hasta febrero de 1987), Ernesto Muñoz Solsona (desde ese mes hasta diciembre de l988), Manuel Ponce (que dejó la presidencia en 1994) y Federico Gómez Lechón.

En su libro, Beneyto asegura que Femeval es 'la principal organización sectorial del sistema asociativo valenciano'. El autor recuerda, de hecho, la fuerte representación de esta federación en la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), en la que está integrada, o en la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Valencia. Una presencia que se explica en el peso del sector que representa, ya que genera el 21% del valor añadido bruto de la industria autonómica, ocupa a alrededor del 25% de los trabajadores valencianos y representa el 31% del comercio exterior, según datos facilitados por la patronal.