Duscher no quiere disculparse y Lendoiro habla de 'gajes del oficio'

La prensa inglesa cayó ayer sobre A Coruña en persecución del hombre del día, Aldo Duscher, el centrocampista argentino del Deportivo, autor de la entrada que podría dejar fuera del Mundial a David Beckham. Pero Duscher no parece dispuesto a disculparse y prefirió darles esquinazo El presidente del club, Augusto César Lendoiro, consideró la lesión de Beckham como 'gajes del oficio'.

Como sus compañeros, Duscher había llegado de madrugada a A Coruña de regreso de Manchester. Fue a entrenarse por la mañana y luego acudió a una comida de confraternidad entre la plantilla, el cuerpo técnico y los directivos, convocada por Lendoiro hace ya unos días. La prensa, entre la que había enviados especiales recién llegados de Inglaterra, de televisiones como la BBC o diarios como el sensacionalista The Sun, le esperó a la puerta del restaurante. Pero Duscher utilizó una puerta trasera para escabullirse de los periodistas.

Nada más concluir el partido, Duscher ya había dejado claro que no tenía intención de disculparse como su compañero Diego Tristán la semana anterior, tras otra durísima entrada al propio Beckham. 'Ellos tampoco lo harían si ocurriese al revés. Yo fui por el balón. Pero este asunto se agranda porque se trata de Beckham', declaró en tono desafiante.

Quien no tuvo inconveniente en hablar fue Lendoiro. 'Estamos preocupados por el estado de Beckham y deseamos que se recupere', dijo el presidente, para quien la acción de Duscher fue 'un lance del juego'. 'Nosotros también hemos sufrido lesiones graves por situaciones similares a ésa y no hemos dicho nada. Tampoco lo vamos a hacer en esta ocasión', concluyó.

'Es para darte dos tiros'

No fue ayer un buen día para Duscher, a quien se le juntaron las críticas por su entrada a Beckham con la difusión de una denuncia presentada contra él por un policía municipal de la ciudad gallega tras un incidente ocurrido en la madrugada del domingo, horas después del partido Deportivo-Mallorca.

Duscher se encontraba en una zona de copas junto a su inseparable compañero, el también argentino Scaloni, quien dejó su coche aparcado en doble fila. El propietario de otro automóvil llamó a la policía municipal porque no podía salir. Cuando la grúa estaba ya enganchando el de Scaloni, aparecieron los dos jugadores y se entabló una discusión.

Según publica La Voz de Galicia, Scaloni mantuvo una actitud respetuosa, pero el agente que denunció los hechos asegura que Duscher se puso amenazante y le espetó: 'Es para darte dos tiros'. El policía levantó un parte y comunicó los hechos a sus superiores, que, de momento, no han decidido si los denunciarán en el juzgado.