Precauciones
Se califica de histórica la decisión casi unánime de los miembros de la AVL de oficializar la normativa usada desde 1983 por la consejería de la Generalitat Valenciana a la que compete desde la promulgación de la Llei d'Ús su aplicación y desarrollo hasta tanto no estén listos la Gramática y el Diccionario, cuando el término apropiado debería ser el de lógica. Y ello porque tanto de lo contenido en el Dictamen del CVC que recomendó los presupuestos mínimos a asumir por la futura normativa a desarrollar por la AVL cuanto de las propias disposiciones normativas de la ley posterior que la creó todo abocaba a adoptar, de entrada, un acuerdo puente mediante el cual habilitar el camino hasta la koiné de destino. Sin instrumento operativo para el despliegue de los propios acuerdos de la Acadèmia, sin normativa referente, por modesta o sincrética que ésta fuese, el impasse habría corroborado los juicios de quienes confiaron en que la institución estaba de sobras, sus mentores políticos, equivocados, y sus miembros, prisioneros de un absurdo político fruto de la megalomanía de los políticos con capacidad de decisión.
El acuerdo lleva adosada, además, la paralela declaración de intenciones que ha de informar la Gramática y el Diccionario: una impecable enumeración de criterios de integración entre la tradición popular y el rigor científico que disponen, asimismo, del mayoritario consenso que debe inspirar el trabajo de la AVL. Enfatizar, pues, como se ha hecho, sobre el tiempo empleado por los académicos para llegar al texto, ponderar malintencionadamente que el acuerdo supone la defunción de esto o el triunfo de lo otro, dedicar comentarios sarcásticos al entusiasmo o seriedad que unos u otros académicos mostraban al final de la reunión traduce el continuismo autista de la insidia de quienes no soportaron la conveniencia de la creación de la AVL, la ridiculizaron desde el día de su constitución y han estado ojo avizor por si se iba todo al traste, mientras la realidad iba desmintiendo su precipitación o irresponsabilidad (aunque haya que celebrar, por el contrario, la conversión tardía a la fe en la Academia de algunos conspicuos detractores de la misma, a la vista de su error).
Sin embargo, no es menos cierto que algunos académicos, prisioneros todavía de unas tutelas que la realidad soberana de la AVL desmiente, creen necesario adosar a los acuerdos puntualizaciones personales fuera de lugar quizás dirigidas a tranquilizar a los enragées.
Siendo inevitable que los feroces críticos de la conveniencia de la AVL -alineados en bandos incomunicados entre ellos-, pongan todos los palos que puedan en las ruedas de esta especie de milagro tardío que la mayoría apoyamos en bien de nuestra respetada y amada lengua propia, puede que resulte comprensible que algunos académicos crean que deben dar cuenta de cada punto que aprueban a sus corporaciones de origen, pero parece recomendable que la propia AVL debería adoptar otra decisión terapéutica más dirigida a que la opinión de los académicos se recoja prudente y estrictamente en los términos y literalidad de los acuerdos de la institución y no sea ni preciso ni conveniente añadir matizaciones, otro sí, alivios por si acaso y excusatio a título particular cuyas evitables consecuencias alimentan a los demodés detractores del consenso, la integración y el trabajo en común que hemos convenido con la AVL. Prudencia y precaución, mucha será poca.
Vicent.franch@eresmas.net
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.