La Bolsa entra en dique seco

Las perspectivas económicas en Estados Unidos han pasado de muy positivas a estables en apenas dos días y han forzado a los mercados de valores a perfilar un amplio movimiento lateral. El Ibex 35 ha ganado en el total de esta semana el 0,33%, y el índice general de Madrid, un 0,36%.

La confianza en una recuperación casi vertical de la economía estadounidense se ha venido abajo en dos días, obligando a aterrizar a los inversores más optimistas. Para algunos analistas, las perspectivas han pasado, simplemente, de 'muy positivas a estables', lo cual no es malo si se compara la situación con la de dos meses atrás, cuando todo eran dudas. No obstante, las retiradas han estado a la orden del día y se han comido algunos beneficios, dando paso a la apertura de un amplio movimiento lateral.

El Ibex 35 ha ganado en estas cinco sesiones el 0,33%, y el índice general de la Bolsa de Madrid, el 0,36%, un movimiento casi horizontal que cuenta con pequeños altibajos. La Bolsa de Nueva York ha sido, sin lugar a dudas, la gran protagonista en estos días, sobre todo cuando comenzó a descontar las exuberantes expectativas que se manejaban días atrás. El martes, el Dow Jones de valores industriales alcanzaba en algunos momentos los 10.660 puntos y sólo dos sesiones después llegaba a rozar los 10.350. El mensaje de la Reserva Federal sobre posibles subidas de los tipos de interés a medio plazo, junto con el frenazo de los leading indicators, índices de tendencia, de febrero después de varios meses de subida, fueron motivos más que suficientes para considerar que el mercado había 'sobreponderado' la situación.

El momento es difícil a nivel técnico, al observarse algunas dificultades para que los índices alcancen lo que se consideran objetivos básicos -los 8.700 puntos en el Ibex 35-, y lo peor es que se corresponde con una fase delicada de la recuperación económica, que, al parecer, todavía habrá de proporcionar algunos sinsabores.

El mercado español ha estado caldeado por un par de operaciones de compra que, sin embargo, apenas han animado a los inversores. La OPA de Caprabo sobre Enaco, rechazada en principio, se ha solucionado mediante una mejora en el precio, mientras que ACESA se ha adelantado con otra OPA al anunciado intento de fusión de Áurea con Iberpistas y complica la operación.

Otra de las características de la Bolsa española en estos días ha sido el bajo nivel del negocio. Las operaciones institucionales han maquillado casi en cada sesión el dato de la contratación total, pero en operaciones de mercado apenas se han superado los 1.500 millones de pesetas diarios.

Mientras que la atención de los inversores sigue centrada casi totalmente en Estados Unidos, en Europa apenas se conocen datos económicos que permitan entrever signos de la esperada recuperación de la economía.