Alcoy investiga para la OTAN
Personal de la Escuela Politécnica estudia las propiedades explosivas y terapéuticas del óxido poroso de titanio
Alcoy y Bruselas acercan cada vez más sus posiciones. Los descubrimientos sobre las posibilidades de materiales como el óxido poroso de titanio ya no son únicamente tema de los guiones de las películas de James Bond. No se trata sólo de un explosivo potente, sino también tiene capacidad terapeútica y médica.
Un equipo de investigadores de la Escuela Politecnica Superior de Alcoy (EPSA), centro universitario adscrito a la Universidad Politécnica de Valencia, trabajan por encargo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) en el desarrollo de las aplicaciones curativas y explosivas del oxido poroso de titanio.
La investigación la dirige desde Alcoy el profesor de la EPSA de origen ruso, Vitali Parkhutik, que se ha propuesto promocionar el nombre de Alcoy a través de revistas cientificas, donde saldrán publicadas las conclusiones de esta investigación. El profesor considera que este trabajo es un punto de contacto entre culturas europeas. 'Este proyecto de la OTAN trata también de acercar la comunicación de los países del entorno europeo y los estados independientes', explicó Vitali Parkhutik. Esta investigación sobre las posibilidades del oxido poroso de titanio ha obligado a habilitar en el Centro Europeo de Empresas Innovadoras (CEEI) de Alcoy un laboratorio provisional, donde trabajan un grupo de catedráticos rusos que participaron recientemente en Tenerife en un congreso sobre las utilidades de este material. 'Esta colaboración permite a personas de 38 paises llegar a España e intercambiar opiniones sobre cultura y comida', concluyó Parkhutik.
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