El bloqueo de Greenpeace a un barco maderero sigue en Sagunto
Los ecologistas explican su protesta al subdelegado del Gobierno
Por segundo día consecutivo, la organización ecologista internacional Greenpeace impidió el paso al puerto de Sagunto de un buque liberiano cargado con madera tropical presuntamenta extraída de selvas africanas sin ningún tipo de gestión medioambiental. Greenpeace se reunió con el subdelegado del Gobierno, Juan José Sendra, para transmitirle sus preocupaciones, aunque no logró ningún compromiso.
La organización ecologistas, en otra espectacular acción en el Mediterráneo, bloquea con su famoso buque Rainbow Warrior desde el viernes a las tres de la madrugada el paso del Meltemi al puerto de Sagunto. Y desde ese momento, varios activistas de Greenpeace, que se han ido relevando para mantener viva la protesta, permanecen encadenados al mástil y a los troncos que transporta el barco.
Según Greenpeace, que acomete una campaña para salvar de la destrucción los bosques primarios del planeta, el Meltemi transporta madera de las selvas de Liberia extraída de forma insostenible, es decir, arrasando las masas boscosas sin que medien proyectos de reforestación sostenibles. Es más, Greenpeace relaciona a estas empresas madereras africanas con el tráfico ilegal de armas en Liberia.
Mientras mantiene el bloqueo, Greenpeace se reunió ayer con Sendra para transmitirle 'su preocupación por la complicidad con la que el Gobierno español y el sector empresarial valenciano actúan frente al comercio de madera de la destrucción de bosques primarios'. Como condición al desbloqueo del Meltemi, Greenpeace exigió al Gobierno 'que adopte una postura clara y decidida a favor de los bosques primarios' y que el ministro de Medio Ambiente, Jaume Matas, 'prohíba la importación de madera de la destrucción'.
La reunión finalizó sin compromisos de Sendra, a quien también se pidió asilo político para ocho polizones que viajan desde hace varias semanas en el Meltemi. 'Es una triste paradoja que permitamos la entrada de madera ilegal en nuestro país y en cambio rechacemos a personas que huyen de una situación de la que nosotros somos responsables', dijo Miguel Ángel Soto, responsable de la campaña Bosques de Greenpeace España.
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