Está bien tener amigos

Está bien eso de tener amigos. De esos que están contigo en buenos y malos momentos. Me considero una buena amiga de mis amigos, y ahora estoy muy disgustada porque un buen amigo ha sido despedido. Estoy preocupada por él y por 10 amigos de mi amigo que han sido despedidos y que trabajaban todos en el Ayuntamiento de Alcobendas. Supongo que en eso consiste la amistad. Pero esta historia me ha llevado a pensar que existe otro tipo de amistad, distinta a la desinteresada y libre.

Digo yo que todos los miembros del equipo de gobierno socialista de Alcobendas deben de ser muy amigos, porque es muy extraño que 13 personas, que dicen ser de izquierdas, tengan tan poco respeto por algo tan importante como el sustento de un trabajador. Es extraño que entre esas 13 personas, que dicen ser de izquierdas, nadie haya levantado la voz contra lo que es una injusticia. Que nadie se haya sentido mal por tener que justificar lo injustificable.

Es poco coherente que 13 personas, que dicen ser de izquierdas, apoyen algo tan grave como son los despidos sin molestarse en escuchar a los trabajadores. Es raro que a ninguna de esas personas les importe que este Ayuntamiento sea el primero de España en utilizar las causas objetivas para desprenderse de trabajadores. Es raro que 13 personas consientan que un Ayuntamiento de izquierdas utilice medidas propias de un empresariado reaccionario. Quizá sea por amistad. Una amistad mal entendida que lleva a olvidar ideas, principios y deberes.