La Comisión Europea propone medidas para la movilidad laboral
La Comisión Europea va a aprobar el miércoles un ambicioso plan de acción con 25 medidas para poner fin en 2005 a todos los obstáculos legales y administrativos que impiden a los trabajadores moverse libremente por el mercado interior y cambiar de ocupación. España es el país europeo con la tasa de movilidad geográfica más baja, el 0,1% de los trabajadores.
Las estadísticas hablan por sí solas. En 2000, apenas un 1,2% de los ciudadanos europeos cambió de región y un 0,1% decidió dejar oficialmente su país para residir en otro Estado miembro de la UE; es decir, solamente 225.000 personas. El índice de movilidad geográfica en EE UU fue ese año del 5,9%.
En la UE existe un amplio número de barreras que impiden al ciudadano ejercer plenamente su derecho a moverse libremente por el territorio europeo. Los problemas en el reconocimiento de títulos académicos y cualificaciones profesionales, las deficiencias en los idiomas de los trabajadores, las circunstancias familiares, los impuestos, el temor a perder los derechos en materia de pensiones y seguridad social son los principales cuellos de botella.
Además, están los obstáculos para poder cambiar de ocupación entre diferentes sectores económicos. De nuevo las cifras contrastan considerablemente. Mientras que en la UE cambiaron de empleo un 16,4% de los asalariados (20,9% en España), en EE UU lo hizo el 30% de los trabajadores.
Las propuestas de la Comisión actúan en cuatro frentes: adaptar los sistemas educativos a las necesidades del mercado; reducir las barreras legales y administrativas para el reconocimiento profesional; asegurar la plena transferencia de los derechos sociales y mejorar la integración entre políticas de inmigración, empleo y social.
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