Turismo andaluz
Vergüenza, sólo vergüenza ajena es lo que puede sugerir la carta firmada por un tal Julián Muñoz sobre el turismo de Andalucía.
El problema de estos señores es que no piden sólo más para Málaga, sino que quieren menos para los demás. Debería saber, y seguro que lo sabe, pero quiere disimularlo, que el promocionar el turismo de Jaén, Aracena o Sevilla no va en detrimento del de Málaga, sino más bien al contrario, pues, al ser ofertas distintas, son también complementarias. Y que el de Almería, Cádiz o Huelva tienen el mismo derecho que el de su Málaga.
Estos señores, a lo que se ve, están tan cegados por el interés insano de querer ser más a costa de que los demás seamos menos, que no sólo han olvidado el significado de la palabra 'solidaridad', sino que han olvidado, incluso, el de su propio y verdadero interés objetivo, que no está en aislar a Málaga dentro de un mar de pobreza y abandono. Que eso, ni es humano ni les beneficia a ellos.
Los localismos de la Junta no están en el eslogan 'Andalucía sólo hay una', sino en el incumplimiento de esa frase, porque que nos digan dónde van las mayores inversiones de la consejería. El día que la consejería haga públicos sus números, Andalucía entera se manifestará contra Málaga por llevarse más del 80% del total.
Entonces, ¿de qué se quejan? Se quejan porque han visto que eso es rentable. Que sus quejas, sus inventados y artificiosos 'agravios' están sirviendo para que se le quiten cosas a Sevilla y, una tras otra, se las lleven a Málaga. Entre otras, la propia empresa de Turismo.
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