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Indra explota la veta del 'outsourcing'

El 20% de las ventas de la firma electrónica corresponde a servicios para otras empresas

En sólo dos años, la facturación del Grupo Indra a empresas que han decidido externalizar sus actividades ha crecido un 63% al pasar de los 15.000 millones de pesetas que facturaba en 1999 a los 24.500 millones que se han estimado para 2001, lo que supone alrededor del 20% de los ingresos totales. Red Eléctrica y el Metro de Madrid son los dos últimos contratos.

En dos años, los ingresos de 'outsourcing' en tecnologías de la información han pasado de 15.000 a 24.500 millones de pesetas

La historia comienza a finales de 1998, cuando en la dirección de Indra se toma la decisión estratégica de impulsar su negocio de outsourcing. Una actividad con poca implantación todavía en España, pero con un gran potencial de desarrollo ya que cada vez son más las empresas que deciden externalizar algunas de sus dimensiones. Y las denominadas tecnologías de la información son un campo abonado para ello.

Para Tomás Contreras, responsable de esta área en el grupo, se trataba de dar respuesta a la misión de Indra como aliados de sus clientes. 'Queremos convertirnos en partnerships y no en simples proveedores de servicios. Nos casamos con ellos durante años para ayudarles a optimizar su gestión'.

Con esta filosofía han llevado al altar a novios como Red Eléctrica, Telefónica, Sepi, Endesa, Izar, Metro de Madrid... Incluso han contraído algunas nupcias en el extranjero con la portuguesa GALP o la Fundación Favaloro y el Banco Central de la República en Argentina.

Los dos últimos compromisos adquiridos con Red Eléctrica y Metro de Madrid alcanzan un montante de 55 millones de euros (9.200 millones de pesetas), con los que se superarán ampliamente los 40.000 millones de pesetas en las nuevas contrataciones. En el primer caso, el acuerdo es por un periodo de siete años en los que se responsabilizan de la gestión global de la informática corporativa de la distribuidora eléctrica de alta tensión. Por su parte, el concurso convocado por Metro de Madrid ofrecía la gestión de su plataforma tecnológica y la atención a los usuarios internos por un periodo de cuatro años y un coste de 15 millones de euros.

La obtención del mismo, al que se han presentado las principales empresas del sector, ha servido también para el acercamiento de Indra al líder del mismo, el gigante norteamericano IBM, al que podrían haber superado incluso, según Tomás Contreras, aunque no hay datos fiables todavía de esta actividad en España durante el pasado ejercicio.

En el grupo de cabeza se encuentran también las norteamericanas Accenture y EDS.

Entre las cuatro acaparan entre el 50% y el 60% del mercado, una proporción, que según Contreras, tenderá a incrementarse en los próximos años, 'porque este tipo de negocios potencia la implantación de las grandes firmas, más sólidas, con mayor masa crítica, más solvencia, que ofrecen mayores garantías a largo plazo'.

Para este ejercicio, Contreras está convencido de que se mantendrá la tendencia al alza en el sector, 'aunque resulta difícil concretar por las incertidumbres de la economía en general'. Pero es precisamente en el segmento de las tecnologías de la información en el que tanto en España como en el resto de Europa la externalización es todavía incipiente, por lo que se espera un mayor crecimiento durante los próximos años.

Según Contreras, en tiempos de crisis esta actividad es uno de los segmentos de los servicios de estas tecnologías que presenta un mejor comportamiento, ya que permite tener y pagar los servicios que se necesitan en cada momento y permite asimismo una mayor concentración en el negocio fundamental de las empresas.

Según una encuesta realizada por Morgan Stanley el pasado mes de diciembre entre empresas de 11 países europeos, más de la mitad -53%- de los encuestados consideran que el outsourcing será el área de mayor crecimiento durante los dos próximos años.

En Indra están dispuestos a subirse a este caballo no sólo en España, ya que han decidido aprovechar su vocación internacional y potenciar esta actividad en Latinoamérica con su presencia en Chile, Brasil, Venezuela... 'e incluso a más largo plazo en Europa', señala Contreras, aunque la competencia aquí resulta mucho más dura ya que han de enfrentarse a las primeras firmas norteamericanas con las que se encuentran desde hace ya algún tiempo también en otros sectores compitiendo 'codo con codo'.

En 2001 esperan haber superado incluso los objetivos revisados al alza en julio, con un crecimiento de los ingresos en el área de Tecnologías de la Información del 28%, y para 2002 esperan crecer sustancialmente más que el mercado: al menos un 15% en el área de defensa y entre el 12% y el 15% en tecnologías de la información, sin contabilizar el segmento de la contabilidad electoral.

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