Dormir como un marajá
En el sur de la India, en el corazón de la vieja ciudad colonial de Fort Cochin, frente a la iglesia de San Francisco, la más antigua del subcontinente, se alza un hotel que es una auténtica joya. El Malabar House sólo tiene 17 habitaciones, cada una decorada de manera distinta; un jardín con más de cien variedades de orquídeas; un restaurante que propone unos platos que conjugan a la perfección sabores indios y españoles, y un servicio exquisito: algo así como un parador de lujo. Situado en un antiguo edificio colonial holandés, es el resultado de cinco años de trabajo de la española Txuku Iriarte y el alemán Joerg Drechsel, una pareja enamorada de esta tierra que huele a especias y a humedad, de esta pequeña ciudad que conserva el encanto de su influencia judía, holandesa y portuguesa. Ésta es la India culta donde la práctica totalidad de su población está alfabetizada, la India tropical de fuerte influencia europea, la India de los masajes ayurvédicos y de las mujeres vestidas con saris de algodón blanco ribeteados de oro que caminan a lo largo de playas oceánicas. Txuku Iriarte y Joerg Drechsel han dejado todo en Europa para montar este hotel, que ahora se beneficia del boom del turismo en el Estado de Kerala. Ella se ha encargado más del jardín y de formar a los cocineros, como buena donostiarra, mientras él se ha dedicado al diseño y a supervisar la rehabilitación del edificio. La decoración, llena de objetos de arte y de antigüedades, es obra de ambos. 'Cada cultura merece ser presentada de la mejor manera posible', afirma Joerg Drechsel, cuyo pasado como director de galerías de arte y de museos en Alemania se palpa en su hotel.
- Precios: habitación doble, desde 90 euros en temporada baja (de mayo a septiembre) hasta 160 euros en temporada alta (de octubre a abril). www.malabarhouse.com. E-mail: malabar@vsnl.com.En el sur de la India, en el corazón de la vieja ciudad colonial de Fort Cochin, frente a la iglesia de San Francisco, la más antigua del subcontinente, se alza un hotel que es una auténtica joya. El Malabar House sólo tiene 17 habitaciones, cada una decorada de manera distinta; un jardín con más de cien variedades de orquídeas; un restaurante que propone unos platos que conjugan a la perfección sabores indios y españoles, y un servicio exquisito: algo así como un parador de lujo. Situado en un antiguo edificio colonial holandés, es el resultado de cinco años de trabajo de la española Txuku Iriarte y el alemán Joerg Drechsel, una pareja enamorada de esta tierra que huele a especias y a humedad, de esta pequeña ciudad que conserva el encanto de su influencia judía, holandesa y portuguesa. Ésta es la India culta donde la práctica totalidad de su población está alfabetizada, la India tropical de fuerte influencia europea, la India de los masajes ayurvédicos y de las mujeres vestidas con saris de algodón blanco ribeteados de oro que caminan a lo largo de playas oceánicas. Txuku Iriarte y Joerg Drechsel han dejado todo en Europa para montar este hotel, que ahora se beneficia del boom del turismo en el Estado de Kerala. Ella se ha encargado más del jardín y de formar a los cocineros, como buena donostiarra, mientras él se ha dedicado al diseño y a supervisar la rehabilitación del edificio. La decoración, llena de objetos de arte y de antigüedades, es obra de ambos. 'Cada cultura merece ser presentada de la mejor manera posible', afirma Joerg Drechsel, cuyo pasado como director de galerías de arte y de museos en Alemania se palpa en su hotel.
- Precios: habitación doble, desde 90 euros en temporada baja (de mayo a septiembre) hasta 160 euros en temporada alta (de octubre a abril). www.malabarhouse.com. E-mail: malabar@vsnl.com.
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